El técnico blanquivioleta ha ofrecido su visión del primer tramo del curso, que termina con la difícil eliminatoria en Anoeta, y confía en poder mejorar las estadísticas el próximo año

La plantilla del Real Valladolid se ha ejercitado este lunes a las 11:00 horas sobre el césped de Los Anexos con la vista puesta en el partido de Copa del Rey frente a la Real Sociedad.
El cuadro pucelano viaja a Anoeta con un 1-3 en su contra, por lo que tendrá que realizar un encuentro casi perfecto si quiere dar la vuelta al encuentro y clasificarse para la siguiente ronda.
Sobre este duelo que dirá adiós al año 2016 ha hablado el entrenador blanquivioleta, Paco Herrera. El míster comentó en rueda de prensa sus sensaciones en esta primera vuelta y desveló algunos asuntos sobre los que hará hincapié cuando se reanuden los entrenamientos.
“Este partido es distinto por el hecho del parón de navidades”, explicaba Herrera al principio de su comparecencia. “Es fácil que entren jugadores como Ángel, Markel o Rafa”, manifestaba segundos después, desvelando su intención de dar más minutos a los menos habituales.
Pese a que no se ha perdido la esperanza en la remontada, el catalán asegura realizará algunos cambios en el once, aunque en la alineación también estarán algunos de los que acostumbran a ser fijos en los encuentros de Liga. De la misma forma, lamentó la lesión de Anuar, pues la eliminatoria se antojaba un buen escenario para que el centrocampista pudiera probarse.
Una eliminatoria “utópica”, según el entrenador, mas la dificultad no exime al Real Valladolid de sus deberes. La obligación del equipo, dice Herrera, es ganar. Desde el club el mensaje es de confianza y motivación por conseguir la victoria. No obstante, el cuerpo técnico sí baraja la posibilidad de utilizar el encuentro como terreno de pruebas para ensayar alguna táctica de cara al 2017. “Utilizaremos este partido para probar alguna cosa que nos pueda venir bien”, apuntó el técnico.
Herrera también habló sobre la última jornada liguera, que dejó un mal sabor de boca a los pucelanos y la sensación de haber recibido demasiado castigo viendo el buen nivel desplegado en la primera parte. Con estas palabras lo confirmó: “La primera parte fue espléndida. Fuimos un equipo muy competitivo”. Seguidamente su mensaje se tornó más crítico y aseveró haber cometido “errores de bulto” como en el tercer tanto de los azulones, así como otros despistes que provocaron el Getafe se hiciese con los tres puntos.
Después, comentó el problema y ya indudable “talón de Aquiles” del Real Valladolid en esta temporada: el balón parado. Para solucionarlo, Herrera comenta que dedicarán más tiempo para aprender a defender dichas jugadas y propone un marcaje individual con el objetivo de evitar los remates fáciles del contrario: “No dominamos el juego aéreo. Sufrimos mucho. Por eso vale la pena que probemos el marcaje hombre a hombre”.

Mercado invernal
En cuanto a las posibles entradas o salidas en el inminente mercado de invierno, el entrenador considera complicado que llegue alguien nuevo sin que antes se abra un hueco en la plantilla. Sin embargo, no dudó en desvelar sus preferencias y ve con buenos ojos la incorporación de un extremo veloz que permitiese a Villar jugar por la derecha y diese más libertad a Raúl,Mata o José. Si tuviese que salir alguien, apunta, sería uno de los jugadores de banquillo, como el serbio Drazic, con el que se muestra un tanto decepcionado porque demandaba mucho más de él. “No era el jugador que yo esperaba”, admitió.
Paco Herrera confía en una mejora el próximo año, aunque su sistema parece se mantendrá inamovible. Su intención mejorar las debilidades defensivas y conseguir mantener la concentración los noventa minutos. Para despedir bien este primer asalto, el míster blanquivioleta aún no quiere oír hablar de vacaciones. Aun así, entiende que muchos futbolistas estén deseosos de reunirse con sus familias y disfrutar de los días de descanso. “Vienen con el billete en la boca”; bromeó.
Finalmente, y antes de felicitar las fiestas a los allí presentes, lanzó unas últimas palabras que sonaron a deseo navideño de la carta de Reyes. Uno que bien podría ser el mismo para cualquier aficionado del José Zorrilla: “Espero que veamos un gran equipo”.
