Blanquivioletas
  • Primer equipo
  • Cantera
  • Fútbol provincial
  • Fútbol regional
  • Opinión
  • Actualidad
  • EN
Blanquivioletas
No Result
View All Result

Ni manía ni exageración: la psicología revela que este ruido que hace la gente tiene sentido y las razones de tu malestar

por Elena
27 de septiembre de 2025
en Actualidad
Este ruido que hace la gente tiene sentido y las razones de tu malestar

Este ruido que hace la gente tiene sentido y las razones de tu malestar

Una psicóloga lo confirma: tener ciertos rasgos en tu personalidad te hace más propenso a sufrir ansiedad

Ni León ni Segovia: National Geographic elige esta ciudad de Castilla y León como una de las más bonitas de España

Un experto lo confirma: ese yogur que en el supermercado te venden como griego realmente no lo es, y esta es la razón

Es probable que, en algún momento, te hayas topado con alguien que hace ruido al masticar, al sorber o que hace varias veces ese molesto clic con un bolígrafo y hayas sentido una sensación de malestar o de incomodidad bastante intenso, lo que te ha podido acarrear comentarios o pensamientos en los que te llaman o te llamas a ti mismo exagerado/a. Pero esto no es que tengas una manía rara, sino que la ciencia ya ha dicho que esta reacción tiene bastante sentido y hasta le ha dado un nombre, que es el de misofonía, un un trastorno que genera irritación extrema ante ciertos ruidos específicos producidos por otros seres humanos.

Lo cierto es que este tipo de ruidos son inocuos o pasan desapercibidos para la mayoría, pero quienes sufren de misofonía los experimentan como algo que les impacta emocionalmente de una forma muy real y palpable. Y es que para ellos esto no es algo que simplemente sea molesto, sino que dispara una respuesta física y psicológica que puede incluir aumento del ritmo cardíaco, ansiedad o enfado intenso. Lo que muchas personas perciben como una reacción desproporcionada tiene base científica, ya que la misofonía provoca que el cerebro interprete ciertos ruidos como amenazas o perturbaciones, incluso cuando se trata de sonidos cotidianos.

Qué es la misofonía y por qué ciertos ruidos nos afectan más

Tal y como ya te hemos adelantado al principio de este artículo, la misofonía es una intolerancia selectiva a ciertos ruidos, como masticar, respirar fuerte, teclear o incluso el tic tac de un reloj. Según expertos como Guillermo Martín Melgar, farmacéutico conocido en redes sociales como @farmaceutico_enfurecido, este trastorno no depende del volumen del ruido, sino del contexto y del tipo de sonido, siendo además un fenómeno que afecta más o menos al 5% de la población y que, por desgracia, puede interferir de manera negativa en la vida diaria de las personas que lo sufren.

Hay que tener en cuenta que para aquellas personas que padecen misofonía hay una reacción emocional muy profunda nada comparable a una molestia que se pase al poco tiempo. Y es que aquellos que sufren de este problema pueden experimentar irritabilidad, tensión muscular e, incluso, una necesidad apremiante de alejarse de la fuente del sonido, lo cual puede ocurrir tanto en espacios cerrados como cines o en el transporte público, hasta en comidas con familiares y amigos, algo que puede llegar a limitar que esa persona esté cómoda y que participe socialmente, además de generar ansiedad anticipadora.

Algunas estrategias que podemos seguir para sobrellevar la misofonía

Uno de los aspectos más importantes es comprender que la reacción ante este tipo de ruido no es culpa del individuo. Darle un nombre, misofonía, y entender que la molestia es real aporta un alivio inmediato, además de que es importante saber que no se trata de exagerar, sino de un trastorno reconocido, lo cual ayuda a manejar mejor la exposición y a implementar una serie de estrategias de protección que nos ayuden a minimizar el impacto que tiene sobre nuestra vida diaria. Algunas de ellas son las siguientes:

  • Lo primero y más obvio es evitar situaciones donde se prevea la presencia de ruidos que puedan desencadenar la misofonía.
  • Es recomendable para estos casos el uso de tapones o auriculares que reduzcan la intensidad del ruido ambiental.
  • También podemos emplear lo que se conoce como distracciones auditivas, es decir, música o ruido blanco, los cuales enmascaren el ruido que nos supone un problema.
  • Otro recurso que podemos emplear es el de acudir a profesionales en el campo de las terapias cognitivas y conductuales, ya que estas nos pueden ayudar a cambiar la respuesta emocional que nos general los ruidos que nos molestan.

Es importante recordar que actualmente no hay una cura universal para la misofonía, aunque gracias a diversos estudios se ha podido detectar que las anteriores herramientas permiten a quienes padecen misofonía recuperar cierto control y reducir la ansiedad provocada por los ruidos cotidianos, sin que ello suponga aislarse por completo de la vida social.

  • Aviso legal
  • Política de cookies
  • Contacto

© 2025 Blanquivioletas

No Result
View All Result
  • Primer equipo
  • Cantera
  • Fútbol provincial
  • Fútbol regional
  • Opinión
  • Actualidad
  • EN

© 2025 Blanquivioletas