El Real Valladolid suma dos puntos menos que la temporada pasada a la misma altura de campeonato

Las cosas no están yendo del todo bien en Zorrilla y, sí, cabe decir “del todo bien” porque podría ser peor; siempre puede serlo. Los blanquivioletas podrían ser como el Mallorca, el Rayo Vallecano o, mismamente, su próximo rival, el Córdoba que, pese a que ser equipos llamados a estar arriba, en estos momentos están matándose por no descender de categoría.
Podría ser peor. Podrían estar repitiéndose los errores propios del pasado. Sin ir más lejos, de la pasada campaña. ¿O acaso la temporada pasada la situación no era mala? Ya fuera por suerte o por desgracia, en la jornada 32 de la 2015/16 el Pucela marchaba duodécimo, es decir, tres puestos por debajo de donde se sitúa actualmente, pero lo hacía con dos puntos más y con una distancia de tres puntos respecto al play-off y de doce sobre el descenso.
Se podría decir que, ahora mismo, el Real Valladolid está en tierra de nadie: ni se ve realmente atosigado por el descenso –a siete puntos– ni encuentra posibilidades próximas de pelear por play-off –a cinco puntos–. Ya lo dijo Mata este lunes, “hay que ser realistas, primero conseguir cincuenta puntos y luego ya se verá”. Más razón que un santo.
El propio delantero apuntó a que una de las claves por las que el Pucela no se ha enganchado a la zona alta es por la incapacidad de conseguir tres victorias ligueras consecutivas. Aunque también es cierto que, en estos momentos, dos victorias seguidas, sin llegar la tercera, son bienvenidas.
Si bien es verdad lo que comentaba Mata, también lo es que el Pucela perdió el 70% de las opciones de llegar al play-off contra el Nàstic. El partido era clave, no solo por sumar tres puntos sino porque había hasta tres enfrentamientos directos Real Oviedo – Girona, Cádiz – Tenerife y Getafe – Lugo. El Real Valladolid perdió y se dieron los peores resultados posibles para los blanquivioletas: victorias de ovetenses, tinerfeños y getafenses.
¿Y ahora qué? El empate en Zaragoza ha mantenido en cinco los puntos con respecto el objetivo, pero con una jornada menos. Lo único que se puede pedir ahora mismo al Pucela es que sume los cincuenta puntos lo antes posible, para no regresar al pasado y, para si la fortuna fuese enormemente favorable, volver a engancharse a unos puestos de promoción que en estos momentos son aún más quimera de lo que lo fueron el año pasado.
