Después de sus tres últimas derrotas fuera de casa, el Real Valladolid Promesas intentará resarcirse ante la Mutilvera con la mente puesta en seguir en la pelea por la promoción

Cualquier afirmación que relacione al Real Valladolid B con la promoción de ascenso a la Segunda División ha de ser hecha con la boca pequeña. A riesgo de resultar repetitivo, incluso pesado, conviene recordar que el objetivo planteado a principios de curso no era ni mucho menos ese. Sin embargo, el fútbol, que es sabio, le ha colocado en posición de soñar con algo grande e insospechado.
Como el tiempo, la pelota no se equivoca y es siempre justa: pone a cada uno en su lugar; da a cada cual lo que se merece. Y el buen hacer del Promesas le está situando con total merecimiento en esa pugna que no era suya, pero que puede serlo. Y es que a día de hoy se mantiene quinto, a solo un punto del Pontevedra CF, que después de perder su solidez en casa y caer en sus dos últimos partidos en Pasarón, se ha quedado descolgado de las primeras plazas (por mor, también, de sus dos empates a domicilio).
Es por ello que al filial no le han pesado sus tres últimas derrotas fuera de casa, ante Cultural, Boiro y Caudal. En todo caso, para soñar despierto, que es cuando uno sueña lo que quiere, como tiempo atrás dijo Rubén Albés, han de mejorar sus pupilos y demostrar una mejor cara ante la Mutilvera.
Si en Los Anexos están prácticamente intratables y llevan sin caer desde que lo hicieran a finales de agosto precisamente contra el Boiro, lejos de su campo todavía no han hecho gol en lo que va de 2017. De cara a intentar hacerlo, el técnico gallego desplazará a solo dieciséis jugadores, debido a que Sinisterra estará en la importante cita del División de Honor ante el Unión Adarve, a que Deve continúa siendo baja y Mayoral cumple ciclo de amonestaciones, además de andar renqueante y con problemas musculares en las últimas semanas.
Como ya hiciera semanas atrás Manel Royo, Mayoral provocó la quinta amarilla ante la Arandina en el último choque. Como ante los burgaleses, es probable que su lugar en el once lo ocupe un Renzo Zambrano que volvió entonces a la titularidad y que podría seguir así con su readaptación a un grupo del que ha estado meses ausente. De la misma forma, podría ser el momento de ver a Higinio durante más minutos sobre el tapiz.
Los dieciséis convocados para este nuevo desplazamiento son Dani Hernández, Tanis, Arroyo, Calero, Mario Robles, Rubén, Royo, Corral, Rai Marchán, Anuar, Miguel Marí, Renzo Zambrano, Dani Vega, Samanes, Higinio e Iván Martín y, a priori, habrá continuidad en el once que se quedó con los tres puntos en la pasada jornada.
Enfrente estará una UD Mutilvera que está luchando por la salvación y es decimoquinta con veinticinco puntos, uno más que el Burgos, que se encuentra en posición de play-out, y cuatro más que el Guijuelo, que marca el descenso directo, zona en la que están también otros dos equipos de la comunidad como son el Palencia y la Arandina.
Sus dieciocho goles le convierten en el segundo conjunto menos goleador de este Grupo I de la Segunda División B, categoría en la que se están estrenando este año, mientras que los treinta encajados hacen del equipo navarro el que menos encaja de los ocho últimos. Asimismo, solo ha ganado dos partidos en casa, si bien ha perdido únicamente tres, por contra habiendo resuelto los seis restantes con empate.
El envite, que comenzará a partir de las 17:00 horas de este sábado en el Estadio Mutilnova de la localidad navarra será dirigido por el colegiado vasco González Esteban.
