El filial del Real Valladolid venció por dos goles a uno al del Sporting de Gijón en el segundo amistoso de la pretemporada

El Real Valladolid Promesas continúa con su evolución y trabajo de pretemporada y sigue con los buenos resultados. Aunque ganar partidos a estas alturas no da puntos, y por tanto no es relevante, puede servir en el plano mental para considerar que la línea de trabajo es buena. Y por ahora su técnico, Rubén Albés, está satisfecho con el trabajo que se está realizando.
El segundo amistoso, ante el Sporting B, sirvió para “acumular minutos ante un rival de más nivel que el Tordesillas”, a quien ganaron en el primer envite de pretemporada. “Hemos hecho minutos muy muy buenos. Me voy mucho más satisfecho que el otro día. Hemos tenido un ritmo muy muy alto de juego y hemos sido capaces de ser protagonistas con el balón e ir progresando en el juego, manejando situaciones de contragolpe”, afirmó.
El entrenador gallego entendió que “el rival también juega” y no acusó en exceso esos “momentos” en que su equipo jugó “peor”. Pese a perder “un poco” el control del partido, puso en valor que igual que concedieron ocasiones, generaron “muchas”.
Asimismo, con las imprecisiones en la salida de balón también fue comprensivo, ya que cree que provienen “de la carga de trabajo, que hace que haya muchos errores de precisión individual” y se produjeron sobre todo cuando el portero y los cuatro defensas eran juveniles. “Son buenos futbolistas y tienen que ir mejorando ese tipo de detalles”, excusó.
Después de que Paco Herrera prescindiera de Toni de cara a la concentración de Melgaço, era obligado preguntarle por el murciano. Considera que “tiene mucho talento” y que “tiene que seguir trabajando”, porque se trata de un jugador “muy joven”. “Las oportunidades no son fáciles de coger”, ponderó, y recordó que en el vestuario siempre habla de la palabra resiliencia; “la capacidad de superar obstáculos durante la carrera deportiva”.
A su modo de ver, “los jugadores que son capaces de llegar a la élite superan este tipo de situaciones: no jugar durante una temporada, una lesión, una mala primera parte para ser capaces de rehacerse en una segunda, las expectativas buenas que se modifican…”. “Si tienes talento, es lo que te va a hacer llegar donde crees”, aseveró.
Con todo, y después de hablar con Toni Madrigal, tanto él como Arroyo afrontarán un “periodo de ajuste”, debido a “pequeñas molestias” que venían arrastrando y en las que se tendrá en cuenta “el cambio de superficie y de modelo”. “Necesitan aclimatarse a la nueva realidad”, opina, si bien les dio unos minutos de juego que a buen seguro también ayudarán.
Otro nombre propio fue el de Mayoral, que lleva tres goles en dos partidos. Está “sensacional”, según su técnico, y se entiende “muy bien” con Higibio, con quien forma una buena pareja. Por encima de su rendimiento, no obstante, Albés quiso quedarse “con el trabajo general del equipo”, destacando el trabajo realizado en la presión, que limitó “muchísimo” la capacidad “para progresar del rival” y permitió “muchísimas recuperaciones en su campo”.
En todo caso, se refirió, por último, a otros dos nombres propios, Rai Marchán y José Luis Sinisterra. Al primero lo definió como un jugador “con una cultura táctica muy alta, inteligente y con capacidad de liderazgo”, algo que se vio en las órdenes que dio a sus compañeros, siendo una extensión del propio entrenador sobre el terreno de juego. Con la aportación del segundo, que sumó otros noventa minutos, se mostró contento, ya que “no se notó que sea juvenil” y sí sus “capacidades técnicas”, que acompañan a “un nivel de implicación y aceptación en el vestuario” altos.
