El central compareció tras el entrenamiento a puerta cerrada en el que participaron Marcelo Silva y Alfaro, pero todavía son duda para el domingo

El primer equipo del Real Valladolid trabajó en la mañana de este jueves sobre el césped del José Zorrilla. La plantilla se ejercitó a puerta cerrada en el estadio para ir ultimando los detalles del partido ante el Real Oviedo del próximo domingo. Como ya es sabido, Kepa, Bruno Silva y Mojica se perdieron la sesión al estar concentrados con sus respectivas selecciones. Quienes sí estuvieron con el grupo fueron Marcelo Silva y Alfaro, aunque no completaron la sesión. A día de hoy, son duda para el enfrentamiento ante los carbayones pese a su evidente mejoría.
Tras el entrenamiento, Samuel Llorca atendió a los medios de comunicación en la sala de prensa del propio estadio. Vuelve a estar a disposición del Garitano, tras dos jornadas fuera por sanción, algo que sin duda, le ha dejado mal sabor de boca. “Se pasa mal estar dos semanas fuera, sobre todo por una tontería. Ya ha pasado y ahora voy a intentar ayudar si me toca dentro del campo“, comentó.
Aunque han pasado quince días, ni el zaguero ni la prensa han dejado de lado su expulsión en Soria, del que quiere intentar aprender para no repetirlo. “Sobre todo, voy a intentar no cometer el error que tuve. Mi fútbol es marcar la intensidad defensiva y eso no quita que esa acción fuera errónea e intentaré no volver a cometerla”, recalcó. “En el fútbol se toman decisiones en décimas de segundos. En ese caso, solté el brazo y me vio el árbitro; otras veces, como el otro día, le sueltan el brazo a Rodri y no lo ven”, dijo Samuel, quien prefiere dejar de lado las decisiones arbitrales. “Ese partido lo teníamos controlado y teníamos la sensación de que era difícil que nos ganaran. Sucedió lo que sucedió y al final se dio el empate”, subrayó para zangar el partido ante el Numancia.
Más balón
A pesar de no estar ante el Huesca, los periodistas preguntaron al alicantino sobre cómo vio ese encuentro. “Hay cosas positivas y negativas. Hay que quedarse con la primera parte, en la que el equipo hace buen fútbol y tiene la pelota; en la segunda no tenemos el control del partido. Tenemos que aprender de eso, tener el balón y mejorar esa faceta para dominar más los partidos”, remarcó.
Un partido en el que por su sanción y la lesión de Marcelo Silva obligaron a Timor a jugar de central. “Timor es un pedazo de futbolista que siempre va a cumplir y para mí estuvo muy bien. Es de halagar que te cambien de puesto y que lo hagas bien”, apuntó sobre la actuación del valenciano. Ahora, para el partido del domingo, Garitano le vuelve a tener a su disposición, aunque no sabe si será titular o no. “Me encontraba bien antes de la sanción y quiero intentar sumar dentro del campo, aunque es el míster el que tiene que decidir entre los cuatro disponibles. Va trabajando diariamente y no hay nada claro, hay que esperar hasta el domingo”, matizó.
Para ese día, el único objetivo de la plantilla es ganar. “El equipo necesita sumar tres puntos porque te da más confianza, todo hace que sea más positivo, pero hay que intentar llegar a esos tres puntos de la mejor manera posible para conseguir ganar más veces”, comentó. Y dejó claro que la defensa no va a tener más responsabilidad por el hecho de que Julio sea el guardameta. “Julio es un portero que lleva muchos años en el club y esta oportunidad le va a venir bien. Ha tenido pocas ocasiones con el primer equipo y no hay ningún problema. Todos tenemos la responsabilidad de mantener la portería a cero“, puntualizó.
