El técnico del Real Valladolid recordó las dificultades que presentará el conjunto de Pellegrino y desea que la línea marcada traiga tres nuevos puntos

Foto: Real Valladolid
Sergio González no despega los pies del suelo. No lo hizo cuando los resultados acompañaban ni lo hace ahora que el Real Valladolid lleva cuatro partidos sin ganar, pese a las sensaciones ofrecidas ante Espanyol, Real Madrid, Eibar y Sevilla. Y es que sabe que se viene un encuentro complicado este sábado, ante un CD Leganés que no será un rival fácil, a pesar de que en el entorno alguien pueda perder la perspectiva y creer que sí, que el ‘1’ en la quiniela es claro.
Que ese pronóstico se confirme es el deseo del catalán, aunque cree que esos tres puntos solo llegarán si su equipo no varía un ápice su modus operandi. “Va a ser un partido trabado, ellos buscan no dar opción a que el rival se sienta cómodo. Contra el Eibar hubo la sensación de que teníamos que ganar y contra el Leganés también; el equipo ha trabajado de tal manera que se puede pensar eso, pero hay que mantener la humildad, el trabajo y dar importancia a lo nuestro“, aseveró el técnico en rueda de prensa.
El catalán apeló a los medios de comunicación en el intento de moderar esa sensación que puede llevar a un equívoco, puesto que el Real Valladolid es el mismo equipo que subió a Primera y que ostenta el presupuesto más bajo de la categoría.
“El otro día en Sevilla debutó Joaquín en Primera y Calero jugó ante dos delanteros que valen treinta millones. Somos conscientes de los pocos goles que marcamos, pero no por decirlo vamos a marcar más. Vamos a intentar ser positivos y dar valor a lo que tenemos. Da la sensación de que al Leganés le tenemos que ganar, pero debemos tener humildad para hacerlo”, incidió.
Durante estos días el conjunto blanquivioleta ha trabajado en mejorar aquellos aspectos que no se dieron bien en el Sánchez-Pizjuán, como la salida de balón, aunque González no se mostró excesivamente preocupado, puesto que en esta senda de cuatro encuentros sin vencer su equipo ha sido “reconocible en mucha fases” y ha competido “al máximo nivel” con duros rivales: “Sabemos cuál es el camino. Ahora hay que ejecutarlo”.
Esa circunstancia dada en Sevilla servirá para “asimilar un poco más” lo que los vallisoletanos tendrán el sábado enfrente, dado que “la sensación y el trabajo que generan” es el mismo por el dibujo que tiende a utilizar Pellegrino. Si bien se trata de un conjunto “camaleónico” que maneja “varios sistemas”, a tenor de lo visto recientemente se encuentra “más cómodo” en un 1-5-3-2, con el que apenas enreda con balón pero incomoda en la posesión.
“Les gusta presionar el saque de puerta y si no consiguen el robo se encuentran cómodos en un bloque bajo. A partir de ahí, cogen la pelota y dan tres o cuatro pases para buscar profundidad y juego directo, te dan alimento para salir de tu zona y mediante ese juego y la segunda jugada generarte problemas. Su trabajo pasa por no recrearse e intentar encontrar a los carrileros, desmarques de ruptura y segundas jugadas“, analizó Sergio.
Será trabajo de sus futbolistas “intentar ser protagonistas en casa” de cara a intentar alcanzar los veinte puntos, que le dejarían “en una situación privilegiada“, si bien para ello deben tener “tranquilidad para mover la pelota y generar situaciones importantes para meter gol”. Ante la estabilidad alcanzada por el cuadro pepinero en las últimas jornadas, la clave, pasará por la humildad citada. Y, en lo táctico, todo parece indicar que estará en una vuelta al 1-4-4-2 en el que el Pucela “se encuentra cómodo y encuentra su mejor versión”, aunque el técnico no lo confirmó de plano.
Como en las últimas semanas, Sergio González no descartó la posibilidad de realizar alguna permuta, ya que sigue considerando que hay “un grupo de gente importante que está jugando y haciéndolo bien y hay gente entrenando muy bien para poder ser de la partida”. Así, tras otra actuación de nivel, podría ser la hora de Daniele Verde, extremo valorado pero tampoco reconocido por un entrenador que recuperará para la contienda a Kiko Olivas e Ivi y que tuvo palabras de ánimo para sus delanteros, después de los dos ‘no goles’ de Enes Ünal en Sevilla.
Conforme con sus puntas, el catalán no lo está tanto con los criterios aplicados con el VAR. “Pedí a Del Cerro que fuera a la pantalla a mirarlo, porque Toni no interfiere. Es una herramienta que puede ayudar a su apreciación, deberían cerciorarse de decisiones así, o cuando menos mirar las acciones en todos los campos con el mismo rasero”, concluyó.
