El nuevo entrenador del Real Valladolid apuesta por crear una plantilla sólida que ataque y defienda a partes iguales
El nuevo entrenador del Real Valladolid, Sergio González, compareció ante los medios de comunicación a dos días de afrontar su primer duelo a cargo del cuadro blanquivioleta. El sustituto de Luis César Sampedro confía en imponer pronto su estilo, uno que apuesta por formar un bloque “equilibrado y organizado, tanto a la hora de defender como a la de atacar”, según aseguró en su rueda de prensa.
“Soy un enamorado del bloque defensivo. Nuestro concepto es que el equipo este juntito, equilibrado y organizado”. Así confirmaba el míster blanquivioleta su inclinación por construir una plantilla sólida. A falta de ocho jornadas para que concluya la temporada, el catalán busca solución al gran problema pucelano durante este curso: la fragilidad defensiva.
“Es verdad que me gusta jugar con la defensa tan atrás. Prefiero marcar una distancia para que la zona del remate sea más difícil. Estar muy atrasado hace que cualquier rechace o disparo pueda acabar en la portería”, explicaba González.
Así, parece no va a temblarle la mano a la hora de dar su particular pincelada al antiguo planteamiento. Sobre esto último, preguntado por la formación táctica que presentará el domingo ante el Sporting, el técnico responde: “Que investiguen mis antecedentes para que vean con qué se pueden encontrar”.
Tras cuatro entrenamientos al frente de los chicos, el recién llegado a Pucela reconoce tener buenas sensaciones. Asimismo, dice, se siente feliz por la acogida brindada y observa un vestuario unido y comprometido. “El recibimiento ha sido muy bueno. He visto a los jugadores como unas esponjas”, apuntó.
No obstante, pese a reconocer haberse llevado “muchas más cosas positivas que negativas” en estos primeros días, el entrenador del cuadro castellano-leonés confirma su voluntad por cambiar ciertos aspectos, a fin de dejar su huella personal. “Hay cosas que vamos a intentar modificar”, espetó. Más tarde subrayo su intención de crear un conjunto con “identidad”, donde los esquemas de juego pueden variar, pero donde el estilo “ha de ser el mismo en todos los partidos”.
Sergio González aún no desvela sus cartas y, explica, todavía está recogiendo información. Su sistema de juego dependerá, dice, de los futbolistas que tiene a su disposición, del contrario y de sus puntos fuertes. No obstante no descarta presentar opciones como jugar con dos puntas o incluso con tres centrales, aunque esto último lo ve más como “una alternativa para afrontar los minutos finales cuando los contrarios alinean dos delanteros”.
Lejos de señalar nombres concretos, el de Hospitalet de Llobregat señala la importancia del trabajo en equipo, de ahí que apueste por crear un once compacto y solidario: “Esto es un deporte colectivo. Ahora mismo primamos el equipo, el grupo e ir hacia delante todos juntos”. De igual forma, prefiere no hacer cuentas de cara a entrar en el play-off pues su objetivo es “sacar los máximos puntos posibles en los ocho partidos que restan”.
Para que su deseo se materialice, la tarea pasa por ganar el próximo encuentro ante el Sporting, equipo al que define de la siguiente manera: “Es un equipo muy compensado, con buenos jugadores y que está aplastando a nivel de resultados”. El duelo, en palabras de Sergio González, se presenta como uno “que motiva a los futbolistas y que ha de servir de reválida para demostrar y decir que ahí estamos”.
El jefe del vestuario vallisoletano no se fía de las bajas de su rival ya que el cuadro gijonense tiene “un equipo muy amplio”, como apuntó. Su propósito, dice, es “recuperar la intensidad y meter un gol más que el contrario”. Para este choque determinante, pide ayuda a la grada y destaca la importancia de sentir su presencia en el estadio: “Desde aquí hacerles un llamamiento porque es un partido que reúne muchos condicionantes para el espectáculo y los necesitamos”.
Ya para finalizar, interrogado sobre cómo está siendo su adaptación a la ciudad, Sergio González manifestó no haber tenido tiempo para conocer la capital del Pisuerg,a ya que ha tenido mucho trabajo de por medio. Pese a no tener experiencia en Segunda, garantiza que se ha informado sobre la división de plata, al mismo tiempo que expone su intención por elaborar un cambio progresivo: “Es cierto que no tengo experiencia en Segunda, pero uno se actualiza. Estamos intentando acortar los plazos. Todos los cambios bruscos son difíciles. No queremos trastocarlo todo”.
Ontiveros con molestias y Chris Ramos casi descartado
La primera plantilla del Real Valladolid se ejercitó en una mañana lluviosa sobre el césped de los anexos. Al ejercicio grupal no asistieron ni Chris Ramos ni Ontiveros, ambos con molestias musculares, circunstancia que les convierte en dudas para el partido del domingo. El que sí estuvo fue Pablo Hervías, que trabajó con normalidad sumado al resto de sus compañeros.
Ontiveros tiene más probabilidades de entrar en la lista, según ha corroborado su propio entrenador, por lo que su descanso responde a motivos de precaución. “Hemos preferido que hoy descansara para que mañana esté al cien por cien”, subrayó el técnico en rueda de prensa.
Diferente situación para el delantero Chris Ramos, que ha visto como su a priori pequeña lesión se ha ido agravando en los últimos días. “Tenía un problemilla, pero se le ha complicado un poco. Mañana [por el sábado] veremos, pero va a estar difícil”, aseveró su entrenador.