La vanguardia del Real Valladolid Promesas tiene en Guille Andrés su mayor artífice con seis tantos
Cinco delanteros y dieciséis goles marcados. Treinta del equipo en total. Las cuentas son claras, más de la mitad de los goles a favor que acumula el Real Valladolid Promesas en las dieciocho jornadas disputadas hasta la fecha llevan el nombre de Guille Andrés, Jorge Hernández, Toni y Dani Vega.
Si echamos la vista atrás, la temporada pasada a estas alturas Rubén Díaz marcaba la diferencia entre los goleadores con trece tantos. Volviendo al presente, encontramos a Guille Andrés como pichichi, con seis goles en sus botas, y a Jorge con cinco. Los tantos que suma la zona de vanguardia del equipo de Rubén de la Barrera son los mismos que el pasado curso, a estas alturas, llevaban Rubén Díaz y Juanjo.
Que no, que no faltan goles. Ni faltarán. El de Xàtiva se ha hecho con el poder del gol, y eso que se ha perdido diez partidos de los dieciocho que ha jugado ya el Promesas. Ha convencido a propios y a extraños, tanto, que Rubi ha creído necesario hacerle debutar con el primer equipo, no solo en Copa del Rey, sino también en Liga, algo que ha subido la moral de Guille Andrés y ha hecho de 2014 uno de sus mejores años.
De cerca le sigue Jorge Hernández, uno de los fichajes más esperados por la dirección deportiva del Real Valladolid. Dicen que el que la sigue la consigue, y por suerte la vencida llegó una intentona antes. Cinco goles le sitúan el segundo en el ranking de máximos goleadores del equipo, a pesar, al igual que el de Xàtiva, de haberse perdido varios partidos por convocatoria con el primer equipo.
Vino para ser uno de los despuntes del equipo, y a pesar de no haberlo conseguido del todo hasta el momento, quizá por las numerosas idas y venidas entre los mayores y los más ‘pequeños’, el zamorano aparece cuando se le necesita, aunque sea para marcar goles tan increíbles como el que recibió el Racing de Ferrol.
Toni, el pequeño y frágil Toni, ha dejado claro que de eso nada. No son pocas las veces que ha desquiciado a los rivales, ni que con sus rápidas piernas y su desparpajo ha dejado claro que es un jugador más que necesario para los planes de Rubén de la Barrera.
Tres es el número. La cantidad de goles marcados hasta el momento y las asistencias que ha brindado para recibir el mayor abrazo de un compañero tras marcar un gol. Ha resultado ser muy necesario para todo el equipo, pero sobre todo para dos de sus compañeros en la zona atacante, como es el caso de los dos arriba mencionados, que encontraron recompensa con sendos goles ante el Somozas, consiguiendo así una victoria resuelta en la primera mitad.
En Dani Vega ha encontrado Rubén de la Barrera el pilar de su delantera cuando Guille Andrés y Jorge Hernández no están a su disposición. El juvenil acumula dos tantos en su casillero, divididos en setecientos setenta y dos minutos, en los que ha tenido oportunidad de marcar muchos más, pero sin suerte.
A pesar de la confianza del entrenador gallego, ha visto en algunas ocasiones como Toni comenzaba el partido con su ‘9’ a la espalda, algo que lejos de hacerle dudar de sí mismo ha hecho que cada minuto del que disponía lo aprovechase para intentar sumar un nuevo tanto al marcador.
Por último, por goles –no se ha estrenado– y por minutos, se encuentra Sekou. El delantero catalán vino en el mercado de verano y le ha costado doce jornadas entrar en los planes de De la Barrera. Comenzó la Liga jugando tan solo tres minutos, y desde ese momento hasta la jornada catorce, en la que volvió al terreno de juego –veintitrés minutos ante el Racing de Ferrol–, tuvo que ver los partidos pasar desde el frío de la grada.
Dieciséis goles hasta la fecha, treinta en total. No sabemos quién acabará siendo el máximo goleador, ni cuántos tantos acumulará en sus botas; lo que sí está claro es que la pelea por el pichichi está garantizada.