Si ya de por sí el camino del Real Valladolid no está siendo fácil, la baja de sus dos figuras más comunes en el centro de la defensa esta campaña puede ser un bache difícil de superar para el próximo partido en casa. Álvaro Rubio no podrá contar con Javi Sánchez ni David Torres por acumulación de tarjetas amarillas. Una sanción que les impedirá jugar contra el Getafe tras recibir amarilla ante la Real Sociedad el pasado sábado. Un problema más grave del que parece para el entrenador blanquivioleta.
Lo cierto es que ambos han sido bastante recurrentes en las alineaciones del Real Valladolid. Mientras que Javi Sánchez es el cuarto jugador más utilizado del equipo en LaLiga, con 1845 minutos jugados, el caso de David Torres va sumando opciones para escalar en esa tabla, con 1.386 minutos que ha ido acumulando de manera casi semanal, primero como lateral zurdo, desde la salida de Lucas Rosa, y después como central, tras la poca confianza del entrenador en Cömert o Cenk y la reciente lesión de Aidoo, aún convaleciente. Teniendo en cuenta la realidad actual del equipo blanquivioleta, Álvaro Rubio deberá confiar precisamente en los dos centrales cedidos por el Valencia si no quiere inventos para recibir al Getafe.
El caso de Eray Cömert ha sido controvertido. Desde el punto de vista de los datos, sus mejores minutos esta campaña como blanquivioleta los ha jugado como mediocentro defensivo, siendo esta una posición poco recurrente en su trayectoria y que empezó a probar Paulo Pezzolano casi desde su llegada. El suizo ha ido perdiendo fuerza con la llegada de perfiles especialistas en ese rol y, sobre todo, por la poca confianza en sus virtudes como central.
De momento, son 1.281 los minutos jugados por él, muy por encima del central turco con el que puede hacer pareja en la jornada 30. El caso de Cenk Özkakar, con 261 minutos jugados, es bastante descriptivo de la nula confianza en su rol como central. Joseph Aidoo, llegado cedido en invierno, casi iguala sus números, sabiendo además que se ha perdido partidos relevantes en los que hubiera tenido cabida sin duda de no haberse lesionado.