Los exblanquivioletas Mikel Balenziaga y Aritz Aduriz no podrán jugar el sábado en el Nuevo José Zorrilla; el primero, lesionado, el segundo, sancionado.
Cuando la selección española cayó ante Brasil en la final de la Copa Confederaciones, pocos repararon en que la derrota no solo era dolorosa por el tiempo y forma, sino que además impedía que, al contrario de lo que ocurrió el verano pasado, cuando se reeditó el título en la Eurocopa, hubiera amnistiados para el inicio liguero.
En cierto modo, es lo suyo, que aquel que ha sido sancionado pague, aunque los laureles de La Furia Roja en las últimas campañas amenazaban con convertir la excepción en norma, como si lo ordinario fuera en realidad ganar y perdonar. Pero, en esta ocasión, sin triunfo, los jugadores que recibieron una pena al finalizar el último campeonato no verán como torna en alegría, indulto mediante.
Uno de los jugadores que tendrán que cumplir con el castigo impuesto por el Comité de Competición antes de las vacaciones es el exblanquivioleta Aritz Aduriz, que, por tanto, no podrá saltar al césped del Nuevo José Zorrilla en el partido del debut.
El vasco recibió ante el Rayo Vallecano dos cartulinas amarillas en tan solo diez minutos en el encuentro que cerraba la temporada 2012/13, pasando así a convertirse en el delantero más tarjeteado de Primera División, junto al espanyolista Christian Stuani. La diferencia, entre el charrúa y el donostiarra, está en que el primero vio catorce amarillas, por las trece cartulinas de ese mismo color del segundo y la citada roja.
El curso pasado disputó los dos duelos entre su actual equipo y aquel con el que saltó al primer escalafón del fútbol patrio, marcando uno de los dos goles del Athletic en el partido de San Mamés y convirtiéndose en sujeto de polémica en el de Zorrilla, después del codazo indigno que propinó a Marc Valiente que provocó al catalán una doble fractura facial y por el que no fue expulsado.
Como Aduriz, tampoco podrá vestirse de corto el otro exblanquivioleta convertido hoy en león, Mikel Balenziaga, que arrastra unas molestias en la rodilla izquierda que han hecho que los galenos del club hayan descartado ya su participación ante los que hasta hace apenas dos meses eran sus compañeros. Su lugar en el flanco zurdo de la zaga bilbaína lo ocupará Enric Saborit.
El del sábado en Valladolid no será el primer partido que ‘El Expreso de Zumárraga’ se pierda entre los dos equipos que mayor incidencia han tenido en su carrera, ya que el curso pasado, debido a una de las cláusulas de su contrato, tampoco pudo disputar ninguno de los dos enfrentamientos entre Athletic Club y Pucela.
De este modo, el Nuevo José Zorrilla se quedará sin poder brindar una gran y merecida ovación al lateral, que vistió la zamarra blanquivioleta en 74 ocasiones, y, quizá, sin enjuiciar a un delantero, Aritz Aduriz, cuyo recuerdo es agridulce, ya que si bien el rendimiento que ofreció mientras estuvo en la entidad fue excelso, el recuerdo de su última visita se mantiene aún fresco.

