La jornada 29 del Grupo VIII de la Tercera RFEF no fue la soñada por los equipos de Valladolid, puesto que el CD Laguna y el CD Mojados salieron goleados de sus desplazamientos. Le fue mejor al Atlético Tordesillas, que continúa encaramado a la segunda posición después de una victoria tardía, pero merecida, en Las Salinas.
Atlético Astorga 3-0 Laguna
El líder de esta Tercera RFEF, el Atlético Astorga, no afloja. Así lo pudo comprobar en sus carnes un combativo Laguna, que tenía la ilusión de asaltar La Eragudina, feudo del que, además, es el mejor local de la categoría. No tardó el Astorga, sin embargo, en echar al traste esas ilusiones, ya que solo habían transcurrido siete minutos de encuentro cuando Javi Amor puso el 1-0, un tanto que abriría el choque por la necesidad lagunera, si bien no atinó Hugo Guzón a encontrar el marco. El cuadro astorgano intentó rebajar las revoluciones con el tiempo, tener el balón y reducir las opciones rojinegras; sobre todo, después de marcar Ivi Vales el 2-0 en el 65′. A pesar de los cambios de Mariano Gutiérrez, el marcador solo cambiaría con la sentencia, de David Álvarez.
Atlético Tordesillas 1-0 Mirandés B
El Atlético Tordesillas no pierde comba y sigue a la estela de los maragatos, ampliando a tres los puntos respecto a sus perseguidores, Burgos Promesas y Arandina, gracias a la victoria cosechada contra el Mirandés B. Aunque la borrasca Martinho azotó sobre Las Salinas, los pupilos de Marchena fueron capaces de superar al filial jabato de manera justa, aunque el gol llegara de penalti y en el minuto 83 (por mediación de Villa). Aunque el resultado fuera apurado, no lo fueron las sensaciones, ya que los rojiblancos pudieron marcar con anterioridad en un partido en el que Dani Díez estuvo especialmente activo en ataque, generando algunas de las ocasiones más claras hasta que Samu Aparicio cayó en el área y el árbitro señaló la pena máxima de la postrera victoria.
Santa Marta 7-0 Mojados
Si la del Laguna fue una derrota dolorosa, no menos puede considerarse la del Mojados, a quien no le salió nada en su visita a Santa Marta de Tormes. El Alfonso San Casto vivió una goleada balsámica, puesto que en todo 2025 todavía no habían conseguido ganar, en un partido que empezarían a decantar a la media hora de juego. Diego Alonso marcó el único gol para el Santa Marta antes del descanso, tras el cual los tormesinos se desmelenaron, con cuatro goles en 15 minutos, de Christian, Santos, Villardón y Diego Alonso de nuevo, que dejaban al Mojados sentenciado. En los minutos finales, David Martín y Tomás completarían la goleada.