El Arroyo Pisuerga renuncia a su plaza en Preferente por motivos económicos, a pesar de haber logrado la salvación sobre el césped

“Aunque el refrán dice que hacia atrás ni para coger impulso, nosotros estamos obligados a dar un paso atrás para asegurar la viabilidad del club”. Son palabras de Gabriel Santirso, presidente del Arroyo Pisuerga, entidad cuyo primer equipo milita en la Primera Aficionado y que, a pesar de haber conseguido la salvación en buena lid, sobre el césped, renunciará de cara a la próxima temporada a esta plaza para poder sobrevivir.
En las últimas semanas, se venía hablando incluso de que el club no terminaría la liga, o incluso de algo más, de una posible desaparición de la entidad. Nada más lejos. Santirso reconoce que están al corriente de todos sus pagos, pero, después de haber analizado las dificultades de tener un equipo en Preferente, han preferido bajar un escalón y volver a Provincial el próximo curso.
El presidente es consciente de que la medida puede parecer impopular. De hecho, ha provocado malestar y enfado entre la plantilla, algo que entiende, “ya que es duro que te digan algo así”, aunque, “después de dos meses de mucho pensar en ello”, cree que la decisión tomada es la mejor, más aún cuando algunos partidos “no va nadie del pueblo a verlos”.
“Sé que están enfadados, pero lo primordial es lo económico. No les hemos dado la espalda ni les hemos fallado en nada; en cada viaje hemos pagado el autocar y han tenido sus comidas alguna vez cuando han jugado fuera, ya fueran bocadillos o en restaurantes”, explica el máximo mandatario del club rojinegro, que, asimismo, les achaca a sus jugadores “que exigen mucho, no pagan cuotas y son incapaces de ayudar”.
Con todo, la intención de Gabriel Santirso es que el Arroyo Pisuerga siga creciendo. Si en dos años ha pasado de contar en sus filas a 160 hasta los 300 actuales, para la próxima temporada anhelan que el número siga creciendo, y para ello han dado ya por comenzada la campaña de captación. De este ansia de crecimiento formará parte un equipo que competirá en la Regional Femenina. Y prueba de ello, también, es que se ha acometido una reestructuración interna de la que han formado parte un nuevo coordinador de fútbol 7 y otro de fútbol 11.
La importancia de la gestión económica ha primado sobre lo deportivo, puesto que el aficionado se encuentra actualmente octavo en la clasificación, ya salvado, a falta de tres jornadas para la conclusión del campeonato (esta sábado juegan en casa, en los campos de La Vega, a partir de las seis contra el Ejido). Todo “para que no haya que cerrar”, ya que hay esos trescientos jugadores detrás y esa ilusión puesta para que, si se trabaja “con más cuidado, hacer las cosas mejor más adelante”, zanja Santirso.
 
			