El de las pretemporadas es un mundo curioso. Es un lugar para las oportunidades, pero también para los desterrados. Es el momento de las cenicientas ilusorias y de los errores por falta de forma. En el caso del Real Valladolid, es una ocasión de renovar el aire, de plantear nuevos rumbos sin caer en los errores de siempre. La cantera, para el recién llegado equipo de Víctor Orta, es un tema fundamental, sobre todo para suplir las carencias de una plantilla con evidentes zonas despobladas. Sin embargo, también debe serlo para los puestos en los que hay ya efectivos. Es el caso de los delanteros y, más concretamente, de Arnu y de Jorge Delgado.
La delantera del Real Valladolid, cubierta pero con dudas

Juanmi Latasa, Mamadou Sylla, Marcos André, Arnu y Jorge Delgado son actualmente los delanteros con los que cuenta el Pucela. Cinco para una posición. Con la ventana de fichajes abierta, cualquier operación es susceptible de realización en esta zona en concreto. Juanmi Latasa es, a priori, quien debería dar un paso al frente esta temporada en LaLiga Hypermotion para liderar el ataque. Sylla rindió bien en el último curso en Segunda y Marcos André, con su poca continuidad, arroja más dudas que certezas. En este contexto irrumpen los dos niños, Arnu y Jorge Delgado, queriendo hacerse un hueco entre esta competencia.
En el modelo de plantilla que Víctor Orta quiere aplicar, estas dos piezas podrían ser valiosas, pero de la teoría a la práctica hay una gran diferencia. De hecho, en estos momentos – con mucho mercado por delante – resulta difícil imaginar que ambos puedan formar parte del primer plantel, analizado desde el punto de vista del desarrollo de los dos jóvenes arietes. “Les he dicho que tienen una oportunidad muy importante. Para él [Almada], los jugadores jóvenes son jugadores disponibles y ante los que no hace perjuicio”, dijo en su última rueda de prensa el director deportivo.
El desarrollo de Arnu y de Jorge Delgado

La pasada campaña fue, para Jorge Delgado, espléndida a nivel individual. Cumplió en todas las tareas que se le pueden exigir a un punta de sus características, fue el máximo goleador con 15 goles y dio tres asistencias y otorgó otros detalles al equipo que marcaron la diferencia en muchos partidos, con y sin balón. En su primera temporada como blanquivioleta, derribó la puerta y se ganó una renovación con su correspondiente subida al primer equipo.
Con todo, a pesar de que ya no forme parte de la dinámica del filial, aún debe abrirse paso entre los ‘mayores’ y demostrar que está a la altura de una competición tan exigente. Tanto en fase ofensiva como defensiva es inteligente a la hora de atacar los espacios, cuando está inspirado no erra sus opciones y cuenta con el hambre necesario para cumplir los primeros requisitos de este nuevo proyecto, basados en la voluntad, la entrega, el compromiso y el sentimiento. Sus virtudes podría trasladarlas al este nivel superior y con efecto inmediato.
En el caso de Arnu, su último curso no fue brillante, pero sí le sirvió de mucho aprendizaje y de adaptarse a otros roles. El joven palentino, considerado un vallisoletano más por todos los años que lleva enfundándose la blanquivioleta, cuenta con un techo que parece alto y ya sabe lo que es jugar en Zorrilla en LaLiga Hypermotion. Es uno de los talentos más valorados dentro del club y también fuera del Real Valladolid.
Arnu ofrece movimientos y acciones distintas a las de su compañero, quizás con más recorrido hacia las bandas, apareciendo por dentro y siendo más asociativo en la elaboración de la jugada. Su techo aún está por conocer, pero parece alto. A pesar de su juventud, podría llegar ya su momento con Guillermo Almada. Arnu pretende quedarse en Valladolid y ser importante.
En función de su rendimiento y de lo que se acople más a lo que busque el técnico uruguayo, se determinará la presencia de cada uno sobre el césped. Con todo, la labor de una dirección deportiva a la que ocupa y preocupa tanto la cantera, debe ser consciente de lo mejor para los jóvenes y para su desarrollo, y ambos deben tener cuantos más minutos mejor para ver su evolución y para que puedan progresar. Los dos podrían quedarse en el momento actual para conformar esa demarcación, sin embargo, podrían no ser compatibles.
Entre manos, el Real Valladolid tiene a dos proyectos interesantes, Jorge tal vez pueda ofrecer un rendimiento más rápido, al menos en situaciones más físicas, pero las virtudes de Arnu todavía pueden ir más allá. A pesar de todo, para que crezcan como futbolistas deben jugar, y si los otros tres nombres de arriba continúan en el plantel, una cesión para alguno de los dos podría ser una solución más que válida para el desarrollo de los futbolistas. Antes se evaluará cada caso en concreto para determinar una decisión.
 
			