El que avisa no es traidor. Y la realidad es que en Blanquivioletas se ha dicho muchas veces que el resultado final de la temporada 2024/25 parecía presagiar una alta cantidad de jugadores promocionados que podían ser parte de la primera plantilla del Real Valladolid la próxima campaña en una suerte de ‘Revolución de Los Anexos’. En una temporada 2025/26 que se formará en torno a nuevas consignas y protagonistas, algunos de los futbolistas destacados en categorías inferiores pueden ser relevantes en el primer equipo pucelano.
Así lo confirma la inclusión en las últimas horas de algunos de esos perfiles citados en la galería de jugadores del Real Valladolid para la nueva campaña. Junto a los retornados Meseguer, Biuk y Garri, la inclusión de Jorge Delgado, Maroto, Arnu y Aceves entre los efectivos del primer equipo. Un primer equipo que necesitará refuerzos de manera evidente y en el que, seguro, habrá alguna baja más, como parecen confirmar las últimas noticias en torno a Javi Sánchez, con destino aparente hacia el Hellas Verona.
La luz en medio de las sombras
La temporada 24/25 del Real Valladolid dejó, entre todo el ruido institucional y deportivo, un hilo de esperanza que brotó desde abajo. A medida que el primer equipo se deshacía en su lucha por la permanencia, desde el Valladolid Promesas emergieron nombres que comenzaron a asomar la cabeza sin apenas margen, creándose un espacio sin contexto y sin tener red de seguridad.
Palabras de Víctor Orta en su primera rueda de prensa como Director Deportivo. pic.twitter.com/Ak4PgjQE6h
— Real Valladolid C.F. (@realvalladolid) July 2, 2025
Lo hicieron a pulso. Fueron siete los canteranos sin ficha de primer equipo los que llegaron a debutar en Primera División en la temporada pasada. Una cifra que habla tanto de necesidad como de una voluntad real por recuperar el vínculo con la base. Arnau Rafús, Raúl Chasco, Iago Parente, Adrián Arnu, Ibrahim Alani, Mario Maroto y Xavi Moreno fueron el reflejo de un movimiento que va más allá del simple relevo.
Detrás de esos minutos hay una idea clara y la nueva dirección deportiva puede tener un papel clave. El equipo de Víctor Orta habló desde el primer minuto de construir un equipo que no solo compita en Segunda División, sino que lo haga con identidad y con un sentido de responsabilidad con la cantera. Esa identificación con Los Anexos debería ser un pilar desde el que construir no solo un futuro propicio para los objetivos a corto plazo, sino un salvavidas para el futuro.
El propio Víctor Orta ha confirmado públicamente que le gusta contar con cinco o seis futbolistas del Valladolid Promesas para ir rotando en el primer equipo, algo que podría ser propicio para que, de cara al nuevo curso, jugadores como los citados y algunos de los que parecen destacar actualmente, podrían tener su oportunidad. No parece un brindis al sol y, en realidad, confiar en esos perfiles puede ser una de las pocas certezas sobre las que el club podría edificar el próximo proyecto.
Una realidad más allá del Valladolid Promesas
Lo cierto es que no queda solo el tema en el Real Valladolid Promesas. La promoción en las categorías inferiores del equipo blanquivioleta ha sido un éxito también para los perfiles que venían desde más abajo, evidenciándolo a través del buen nivel mostrado por jugadores aún en etapa juvenil, siendo algunos de ellos importantes también en los últimos estertores del curso, como los ya citados casos de Alani o Parente.
Además de eso, de todos los jugadores que han ido rotando entre filial y juvenil, hasta nueve son de Valladolid: Koke Iglesias, Iago Parente, Hugo San, Miguel Flores, Diego Arco, José Luis Aranda, Miguel Platero, ‘Rulo’ González y Yago San Miguel. Un orgullo que va más allá de los resultados y que vuelven a mostrar la importancia de un arraigo que no se ha de olvidar.