Mucho queda por delante como para hablar de ascensos, pero el fútbol de Valladolid tiene a dos equipos con claras aspiraciones a subir de categoría. Mejor dicho, los mantiene, puesto que Atlético Tordesillas y Betis CF tuvieron ya ese objetivo al alcance de la mano la temporada pasada, cuando solo la fatiga y la mala fortuna les apenó de un sueño que sigue vivo, pues mandan los dos conjuntos de Valladolid en sus respetivas categorías, Tercera Federación y Regional de Aficionados, respectivamente, después de sus últimos triunfos cosechados.
El Atlético Tordesillas comanda con puño de hierro el Grupo VIII de la Tercera División después obtener en Las Salinas nada menos que su novena victoria seguida, una racha inaudita y dificilísima en una categoría de tal competitividad. La consiguió, además, contra el Palencia CF, una suerte de ‘enemigo íntimo’ por cuantos actores se cambiaron de bando el pasado verano, pasando de militar en la Villa del Tratado a hacerlo en los morados. Una vez más, y uno ha perdido la cuenta ya de las veces que van, la épica apareció en Las Salinas para hacer más líder al Torde, gol de Miguel Hernández mediante, en el minuto 86.
Ciertamente, son solo tres puntos de ventaja los que tiene respecto a su rival del pasado fin de semana -aquello de enemigo es una forma de hablar; no lo son-, si bien la racha triunfal de los futbolistas de Álex Izquierdo anima a creer a cualquiera que este año puede ser el definitivo en el que a orillas del Duero se celebre por fin el ascenso. Pero como lo primero es lo primero, antes los tordesillanos querrán cerrar 2025 en todo lo alto, algo para lo que deberán mantener a raya a los dos Palencias; también al Cristo Atlético, sacando al menos cuatro puntos de seis ante Almazán y Mojados en las dos jornadas que quedan para acabar el año.
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El Betis, en línea ascendente
Cuando jugaron la ronda preliminar de la Copa del Rey, en el seno del Betis CF insistían en que aquel hito no les debía apartar de lo realmente importante, que es la liga, y, efectivamente, no lo ha hecho. A los pupilos de Chemi Beltrán les costó cogerle el punto a la competición, dado que solo cosecharon una victoria en las cuatro primeras fechas, si bien encontraron en la casi vecina La Cistérniga el lugar donde poner un punto de inflexión. Ganar el derbi allí, a cinco minutos de La Finca de Canterac, sirvió para iniciar una racha de siete triunfos y una sola derrota en las últimas ocho fechas.
El Grupo B de la Regional de Aficionados está más apretado aún que el VIII de Tercera Federación, ya que el Betis solamente aventaja en una unidad al Ciudad Rodrigo (a quien muchos señalan como el otro rival a batir en pos del ascenso), en dos al Salamanca B y en tres a La Bañeza, si bien sus dos últimos partidos antes de terminar el año son en Valladolid, y ambos en la Finca: contra el Noname y el Victoria, dos equipos que pelean por no bajar. En ellos, los verdiblancos buscarán seguir en esa línea de maximizar los pocos goles que lleva (solo doce, el tercero que menos) y solidificar su portería (ha encajado siete tantos, menos que nadie).
La Liga Nacional, la cruz para el fútbol de Valladolid
La situación de Atlético Tordesillas y Betis CF contrasta con el momento de otros equipos de Valladolid; aunque no solo, sobre todo la Liga Nacional Juvenil, en la que militan cinco vallisoletanos este curso. En esta -igual que en la Regional de Aficionados- el Victoria lucha por salvar la categoría, igual que el recién ascendido San Agustín. Los primeros tienen el objetivo lejos, a ocho puntos, mientras que los colegiales tendrían la salvación solo a uno… sin tener en cuenta posibles arrastres (el Burgos está en descenso en División de Honor y Unionistas con solo un punto de ventaja).