El italiano, muy emocionado, hizo balance de la temporada junto a Alcaraz, Borja, Míchel, Plano y Anuar
Con la temporada finalizada, es el momento para hacer balance de lo que dado de sí el curso del Real Valladolid. Tras el final del choque ante el Valencia, algunos de los protagonistas compartieron sus sensaciones después de un año con “muchos obstáculos y muchas piedras en el camino”, como resumió Alcaraz. “El equipo estaba mentalmente preparado y lo ha demostrado, no solo en sala de prensa, si no en el campo”.
El catalán, “contento” con su trabajo y con seguir otro año con el “sueño” de Primera, agradeció a la afición que haya sido “el jugador número doce”. Con tres años más de contrato, solo piensa en “desconectar”. “Si tiene que venir algo, bienvenido sea para cualquier jugador. Mi cabeza está en las vacaciones y en estar tranquilo, pero tengo contrato”, finalizó.
Especialmente emocionado por el apoyo recibido se mostró Daniele Verde. “Esta afición me ha hecho llorar, nunca he vivido algo como lo de este año. Pase lo que pasé seguiré amando y queriendo al Real Valladolid y a su afición porque se merece todo el cariño del mundo”. Su futuro es una incógnita, pero el italiano no dudó a la hora de desear que “el Pucela se quede en Primera toda la vida”.
También con los sentimientos a flor de piel habló Borja, que calificó estos días como “muy intensos, especiales y emotivos”. “Ha sido la combinación y el momento más especial de todos. Ojalá hubiera aguantado un par de años más”, reconoció. Sobre su poca participación este curso, explicó que “la idea no era esa” pero que ha sabido “llevarlo bien”.
Ahora, en su despedida, el gallego es incapaz de quedarse con un solo momento de sus tres etapas como blanquivioleta. “Todo tiene su importancia. En mi segunda etapa pasé un momento muy duro pero la primera vez fue especial. En esta me retiro del fútbol, con un ascenso muy duro el año pasado y manteniéndonos en Primera”.
Otro de los que valoró el curso fue Míchel. El valenciano aseguró que la permanencia es “algo increíble y tiene mucho mérito”. “Lo hemos trabajado muchísimo, hemos corrido más kilómetros que nadie y hecho un gran esfuerzo. Finalmente ha tenido su recompensa”. Asimismo, el centrocampista aseguró que siempre han salido a “dar la cara y defender el escudo”, pese a que ha habido momentos en los que les ha “faltado gol”.
Al igual que Alcaraz, afirmó que su cabeza “solo está en celebrar y desconectar” y no despejó las dudas sobre su futuro. “Ahora quiero disfrutar, es mi representante el que está en negociaciones. Aquí estoy feliz: la afición me quiere y yo los quiero. Me han ayudado muchísimo y estoy como en casa pero en el fútbol nunca se sabe. Lo he dado todo por esta camiseta y he estado tres años encantado; nunca he estado tantos años en ningún club y eso significa algo“, subrayó.
Por su parte, Óscar Plano también se mostró muy contento por seguir en la élite del fútbol español un curso más. “Hemos tenido momentos muy malos y otros muy buenos, pero hemos sabido sobreponernos y por eso estamos ahí. A nivel personal, este año he estado en otras facetas pero me alegro de que el míster haya confiado en mí y de ayudar al equipo”.
Una temporada que ha sido muy especial para Anuar, que ha disputado su primera temporada en lo más alto. “Me ha servido para hacerme a la categoría, ver el ritmo de juego y el nivel de los jugadores con los que te encuentras. He estado muy a gusto: sentía que iba creciendo a pasos agigantados. Fue una pena que la lesión me haya frenado pero estoy tranquilo y mentalizado para darlo todo el año que viene”, apuntó.
Por último, el ceutí valoró el crecimiento de la cantera blanquivioleta. “Han sido años muy difíciles para la cantera, en la que muy pocos jugadores conseguían asentarse en el primer equipo o dar ese salto tan complicado. Ahora nos sentimos importantes y tenemos el cariño de Pucela entera. Podemos hacer grandes cosas en el futuro y darle mucho al Real Valladolid“, sentenció.