Miroslav Djukic no podrá contar en Vigo con Jesús Rueda, Víctor Pérez, Patrick Ebert, Óscar González y Manucho, cinco jugadores indiscutibles en sus planes hasta la fecha.
Al principio fue Jesús Rueda. Más tarde, Patrick Ebert. Luego Óscar González. Y Manucho. Y, para terminar, la grave lesión de Víctor Pérez. Cinco puntales del equipo. Cinco jugadores que han jugado más del sesenta por ciento de los partidos disputados hasta la fecha. Cinco hombres que dejan maltrecho al Real Valladolid para su visita a Vigo. Que dejan el ’20+5′ de Djukic en un “dejad que los niños se acerquen a Djukic”, con los ya conocidos Lolo y Rubén Peña completando una lista en la que se estrena el central del filial Iván Casado.
El palentino no será el único citado por primera vez. Daniel Larsson lo hará previsiblemente para ser titular en el extremo derecho, después de un mes y medio ejercitándose con sus compañeros. Y hasta ahí lo positivo. Hasta Jorge Pesca, que entró en lista para los partidos contra Getafe y Granada, terminó la semana tocado.
Pero hay recambios de garantías. Sereno llegó al parón quizá en su mejor momento del curso. Larsson es una incógnita de la que todos los que le ven trabajar hablan bien. Y la calidad de Bueno es de sobra conocida. Como la de un Javi Guerra que parece resucitado. La duda, quizá, se encuentra en el mediocentro. Pero vayamos por partes.
Cuando Jesús Rueda cayó lesionado, antes de la visita del Real Madrid, la esperanza con respecto a su recuperación pasaba porque se produjese antes del final de año, con el fin de que pudiese estar disponible para el primer partido del año en Balaídos. Tal es así que llegó a incorporarse al grupo, pero al final se decidió no arriesgar.
Cosa lógica, ciertamente. ¿Para qué hacerlo? No solo se confía en su sustituto, sino que además tampoco podría haber viajado con el equipo debido a la polémica que mantuvo con el colegiado aragonés Clos Gómez en el descanso del partido contra el Fútbol Club Barcelona y que ha derivado en dos partidos de sanción para el pacense.
Poco importa que, como dice Rueda, el trencilla le llamase “forofo”. Como quién lo identificó y por qué estaba donde no debía. El castigo está impuesto y supone un contratiempo para un Real Valladolid apremiado por unas bajas entre las que se encuentra también Ebert, a pesar de que también se esperaba su recuperación para esta misma semana.
En la Red se planteó un ligero debate, poco ruidoso, sobre si Óscar González debía forzar su quinta cartulina amarilla en el otro estadio gallego de la élite para descansar en el último partido del año y no perderse la visita a las Rías Baixas o las de Mallorca o Zaragoza a Zorrilla. Total, que la deportividad imperó -no será este portal quien lo critique- y Djukic tampoco podrá contar con él.
Por encima de las citadas ausencias, lastimosas, si hay una llamativa es, sin duda, la de Manucho. Para variar, como casi en cada parón, la citación de su selección ha resultado incómoda, en esta ocasión no tanto por la llamada en sí como porque el calendario la convierte en ello. Y no porque así lo considere quien escribe, sino porque la normativa FIFA no ampara al Real Valladolid en su afán de contar con el angoleño por un solo día.
Dice el ente del fútbol en su Reglamento sobre el estatuto y la transferencia de jugadores en el artículo 1d del apartado relativo a la liberación de jugadores para equipos representativos de la asociación: “Se liberará a los jugadores para el periodo de preparación […] catorce días antes del partido de apertura del torneo internacional”; plazo de catorce días -avatares del destino-que vence este sábado.
Hasta aquí todo correcto. La cuestión es que otros jugadores citados para la Copa África de Naciones sí pueden participar en la jornada de este fin de semana debido a que los partidos de sus equipos tienen lugar bien el viernes o bien el propio sábado; véase los casos de Ikechuku Uche en el Villarreal, Nosa Igiebor en el Betis o Ndri Romaric en el Zaragoza. Sofiane Feghouli, por su parte, fue descartado por Ernesto Valverde para el enfrentamiento ante el Granada, pero podría haber sido citado, todo lo contrario que El-Arabi, que podía haber estado, y sin embargo está ya con su selección.
La solución, por tanto, podría haber pasado por un acuerdo con la Federación Angoleña. Aunque si ni tan siquiera El-Arabi volvió con el Granada tras el parón por culpa de la dichosa citación debiendo hacerlo… En el caso de Manucho, no es la primera vez que el calendario perjudica al Real Valladolid, ya que el curso pasado fue el único jugador citado para disputar a un partido no incluido en el calendario FIFA entre la selección y un combinado de jugadores del Girabola.
El último contratiempo, quizá el más grave por la falta de un sustituto de un perfil siquiera semejante y por el tiempo que estará de baja, es la ausencia de Víctor Pérez, que abre una incógnita en el once. Quizá lo más lógico, por el número de minutos disputados, es que Lluís Sastre sustituya al albaceteño a corto plazo no obstante.
Juan Neira y Javi Baraja son las otras dos opciones con las que cuenta Miroslav Djukic, como el exjugador del Huesca, ninguno del mismo corte de Pérez. Ciertamente, tampoco los otros ausentes cuentan con un sustituto cortado por el mismo patrón, pero no resulta ni mucho menos exagerado considerar esta baja la más importante teniendo en cuenta que Víctor Pérez lo ha jugado todo.
No obstante, tal y como afirmó Djukic el viernes en rueda de prensa, no ha lugar a las excusas. Las ausencias son de relevancia y con ellas el equipo pierde a cinco jugadores importantes y obliga a llenar el armario con jóvenes promesas del filial. Pero el equipo tiene mimbres suficientes como para competir. Y que luego sea lo que Dios quiera.