El alemán completó la sesión, mientras que Valiente estuvo al margen. Después, Larsson atendió a los medios de comunicación.
El Real Valladolid empieza a ver la luz al final del túnel. Más concretamente la ve Patrick Ebert. El alemán, que cayó lesionado en el partido frente al Real Madrid, ya entrena con el resto de sus compañeros. Miroslav Djukic podrán contar con él ante el Mallorca, si todo sigue su camino.
El que no pudo ejercitarse fue Marc Valiente. El central sufre unas molestias tras el partido frente al Celta. Su compañero en el eje de la zaga, Jesús Rueda, también estuvo al margen. El extremeño se incorporará con el resto del grupo en los próximos días.
Djukic sigue dando oportunidades a la cantera. Muestra de ello es la presencia de Pape en el entrenamiento de la fría y nublada mañana del lunes. Pese a que el jugador solo tiene quince años, ha llamado la atención del míster. El serbio es consciente de que necesita gente en el centro del campo y cuenta con el canterano para completar las sesiones. De momento solo para eso, puesto que unos problemas administrativos le impiden jugar en competición oficial.
Larsson debutó ayer en Balaídos. El sueco pasó por zona mixta, donde comentó estar “contento” por el estreno y “disgustado” por la derrota. “Me sentí más a gusto en el centro”, añadió. El atacante tiene “muchas ganas de jugar en Zorrilla y conseguir tres puntos”. Fue el primer partido y quizá es un poco pronto para juzgarle, pero ganas no le faltan. “Aún puedo dar mucho más de mí”, reconoció.
La primera plantilla disfrutará este martes de un día de descanso, por lo que regresará a los entrenamientos este miércoles a partir de las once de la mañana en Los Anexos.