El Real Valladolid no conoce la victoria sin el extremo teutón, además de haber conseguido la friolera de diez puntos gracias a sus cinco goles anotados hasta el momento.

Patrick Ebert está de moda en la liga española. No se trata de una intuición, sino de una realidad. El alemán ya es considerado a estas alturas de campeonato como una de las revelaciones de la temporada, con diecinueve partidos todavía por disputarse. ¿Lo mejor para el Real Valladolid? Que como el resto de fichajes de verano, llegó a coste cero.
Pero para el equipo de Djukic la presencia de Ebert sobre el campo jornada tras jornada se antoja más que necesaria, no solo por todo lo que pueda aportar con su trabajo, constancia y calidad. El extremo diestro se ha perdido cinco partidos ligueros por ahora y el Valladolid no ha sido capaz de llevarse los tres puntos en ninguno.
A saber, ante el Atlético, Valencia, Deportivo, Barcelona y Celta. Todos ellos tienen un denominador común, que Ebert no saltó al césped. De hecho, el Pucela solo ha sumado dos puntos de quince posibles cuando no está el ex del Hertha de Berlín.
Aunque tampoco se puede decir que el conjunto blanquivioleta dependa solo de su presencia, como se puede ver en el propio juego del equipo, es evidente que sin él el ataque del Valladolid baja enteros.
El otro lado de la balanza
Además de tratarse de un gran año para Ebert por convertirse en la comidilla del panorama futbolístico español, el alemán tiene otro motivo para estar satisfecho tras su salida del Hertha de Berlín. En las seis temporadas que permaneció en la primera plantilla de su ex equipo tan solo materializó ocho dianas, siendo la 2008/2009 la más prolífica con tres goles.
En la presente campaña ya ha celebrado cinco, renta que a buen seguro ampliará de aquí al final del campeonato regular. Semejante dato no hace sino demostrar que el teutón ha explotado futbolísticamente, ya que echando números su media de goles por temporada hasta ahora se quedaba en poco más de 1’3 por año.
Pero hay más. El Real Valladolid descansa en el décimo puesto de la tabla con veinticinco puntos, situación en la que se encuentra en gran parte gracias a la inestimable ayuda del extremo diestro. Los cinco goles que ha materializado hasta el momento han ayudado a conseguir nada menos que diez de esos veinticinco puntos, una cifra nada desdeñable.
Además de los dos tantos conseguidos ante el Mallorca, que suponen los tres últimos puntos del Valladolid y en los que ha participado de manera directa Ebert, también hay que tener en cuenta los conseguidos a domicilio en el Reyno de Navarra y en el Sánchez Pizjuán. Cuatro goles, nueve puntos. Difícil ser más rentable.
La última de las cinco ocasiones que el teutón hizo que el portero contario terminara recogiendo el balón del fondo de la red corresponde al empate cosechado ante la Real Sociedad en Zorrilla, en el que Ebert cooperó con el primero de los dos goles del Valladolid. Total, diez puntos. Y, por qué no decirlo también, gran parte de sus cinco dianas han sido de bella factura, lo que demuestra la gran calidad que atesora en sus botas.
Queda pendiente, al menos para la afición blanquivioleta, de ver si es capaz de mantener el nivel en la segunda vuelta. Visto lo visto, y con el listón tan alto que ha dejado, fácil no lo tiene.
