Análisis del próximo rival del Real Valladolid.

Tras la tempestad, llega la calma. O en este caso al revés, tras el descanso, que bastante bien le ha hecho al Real Valladolid con dos semanas para recuperar algún que otro efectivo, toca volver a la guerra de la Liga en la que no queda otra que ganar. Enfrente estará el Sevilla, un equipo al que si bien no se le dan especialmente bien sus visitas al Nuevo José Zorrilla, sí llega al menos en un buen momento de resultados que no de juego.
Por su parte el Pucela empieza a mirar de reojo los puestos de descenso, más calientes que nunca, y que desde hace unas semanas dejan notar su quemazón en la espalda de los de Juan Ignacio Martínez. Cinco jornadas y más de un mes y medio sin sumar de tres es demasiado tiempo y, por si fuera poco, no hay tiempo para tomárselo con calma.
De menos a más
Lo ha repetido Juan Ignacio Martínez por activa y por pasiva muchas veces en los últimos días y semanas, las lesiones a las que tiene que hacer frente su plantilla no son excusa. Y es que el Sevilla llega poco más o menos igual. Cheryshev, Cicinho, M’Bia… Una lista de tocados de larga duración a la que se han unido esta semana Fazio, Marin y Rakitic, siendo este último seria duda para jugar este domingo, mientras que los dos primeros se lo perderán seguro.
Lo cierto es que las bajas de Marin y Rakitic, de confirmarse la del segundo, podrían hacer mucho daño al centro del campo de un Sevilla que desembarca en Zorrilla después de dos victorias y un empate en los últimos tres partidos, es decir, con siete puntos de los últimos nueve. Y eso sin contar el último envite de Europa League hace algo más de dos semanas, en la que se impuso por 2-0 al Friburgo.
Bien es cierto que el conjunto de Emery empezó algo dubitativo, de hecho no consiguió la victoria ante la sexta jornada, pero desde entonces ha remontado el vuelo y los hispalenses descansan ahora mismo en la décimo primera posición de la tabla con nueve puntos. Pero no solo es cuestión de la clasificación.
Emery no termina de convencer a la grada de Nervión con algunos movimientos tácticos desconcertantes, el primero de ellos el de situar a Rakitic como pivote en vez de mediapunta. En el último partido, con el Almería delante, a punto estuvieron los rojiblancos de llevarse un punto del Sánchez Pizjuán, algo que evitó precisamente el suizo-croata en el tiempo añadido con un gol de cabeza.
Goles a raudales

Precisamente Rakitic es uno de los puntales más a tener en cuenta del Sevilla. Su más que posible baja sería una bendición para JIM, que se quitaría una preocupación de la cabeza. El centrocampista es hoy día el máximo goleador de los andaluces en Liga con cuatro goles, empatado con otra de las bazas del equipo, el delantero Kevin Gameiro.
Los hispalenses cuentan con trece goles a favor en su casillero por catorce en contra, lo que no hace sino refrendar su situación media en la clasificación. El asunto es que las estadísticas, pese a estar para romperse, dicen que es complicado que el Sevilla termine por llevarse los tres puntos de Zorrilla.
¿Por qué? Pues porque lleva nada menos que doce meses sin robar tres puntos de un estadio ajeno.
Puede que esta temporada los andaluces cuenten con poderosas bazas como Bacca, Vitolo, Jairo Samperio o Alberto Moreno, pero muy lejos queda aquel 24 de septiembre –¡de 2012!- en el que el equipo comandado por Míchel se llevó el gato al agua en Riazor con dos goles de Negredo y Rakitic.
Así las cosas, se encuentran dos rachas complicadas. La de un Pucela que lleva cinco jornadas sin ganar, con la de un Sevilla al que se le ha olvidado salir de un estadio contrario con el mejor botín posible. Habrá que esperar hasta la noche de este domingo para ver si uno de los dos consigue romperla.
Curiosidad del rival de esta jornada: Los clubes de Primera y Segunda división de España dependen hoy día económicamente de las televisiones, no hay duda. Pues bien, hay que remontarse hasta 1962 para saber del primer partido televisado, un Sevilla – Real Madrid de dicho año.
