El central valenciano podría debutar esta jornada contra el Tudelano, ante la baja por sanción de Iván Casado
El crecimiento del Promesas en este 2016 también se ha trasladado a su plantilla, puesto que ha aprovechado el mercado invernal para intentar hacer un equipo más fuerte. Excepto en la portería, el filial blanquivioleta se ha reforzado en el resto de líneas. El último en llegar fue Nacho Porcar, procedente del Ontinyent, y, casualmente, podría partir como titular este domingo.
La salida, en calidad de cedido, de Isma Casado al Arroyo CP permitió a José Antonio Prieto ‘Cata’ contar con una pequeña cantidad que, posteriormente, le cuadró para realizar la última incorporación en el Promesas, la de Porcar. Todo ello se produjo en el día del cierre del mercado de fichajes.
Que el Real Valladolid B necesitaba un empujón en su defensa era un hecho. Por ello, desde la dirección deportiva de la cantera blanquivioleta se intentó conseguirlo hasta el último día. La fragilidad e inestabilidad atrás ha sido uno de los puntos negativos del equipo de Borja Jiménez. Las flojas actuaciones –en algunos encuentros– y la presencia de jugadores fuera de su posición natural para cubrir huecos, hacen de la llegada del central valenciano un comodín para fortalecer la zaga.
Pero no solo Porcar aportará estabilidad a la línea defensiva del Promesas, sino también, aunque de manera indirecta, el fichaje de Nikos Karámpelas le vendrá bien al filial blanquivioleta. ¿Por qué? Porque todo hace pensar que Ángel, quien ha cuajado buenas actuaciones con el primer equipo, tendrá el ascenso más complicado.
Además, la lesión del madrileño, cuando podía tener la oportunidad en Zorrilla, le ha tenido apartado del Promesas. Su lugar en el lateral izquierdo lo ha ocupado un Manel Royo que ha tratado de hacerlo lo mejor que ha podido, rindiendo a un nivel aceptable. Pero no solo le ha sustituido en estas semanas, ya que la presencia de Ángel arriba le ha desplazado del centro a un lado varias jornadas más.
El puesto más asentado es el de lateral derecho, con Óscar Arroyo, aunque este también ha tenido que actuar en el eje de la zaga. Al igual que Mario Robles, quien bajó desde el centro del campo para cubrir el hueco, pero no cuajó. Así las cosas, con el refuerzo de Porcar y el regreso de Ángel, el Promesas podría encontrar una defensa estable y fuerte que le acerque todavía más a la permanencia en Segunda B.
¿Otro refuerzo en el once?
Y, casualidades del destino, Nacho Porcar podría debutar este fin de semana. Iván Casado cumple ciclo de amonestaciones, puesto que vio la quinta tarjeta amarilla de la temporada, por lo que Cristian tendrá un nuevo compañero en el centro de la defensa. La buena condición de la última incorporación blanquivioleta –llega tras haber disputado 1.182 minutos repartidos en quince apariciones– abre la puerta a Borja Jiménez para que cuente con el ante el Tudelano.
El rendimiento de Casado no está siendo positivo del todo, por lo que si Porcar debutase con buen pie podría dejar al de Dueñas en un segundo plano. Ya se ha perdido dos encuentros este curso —ante el Compostela en casa y frente al Peña Sport a domicilio– y el filial vallisoletano ganó uno y perdió otro. En el choque de Los Anexos Royo acompañó a Cristian, mientras que en tierras navarras lo hizo Mario Robles.
Por lo tanto, Borja Jiménez tendrá que decidir qué hacer con un Porcar que viene para sumar únicamente, a priori, en el Promesas, puesto que si jugara un encuentro con el primer equipo no podría regresar al segundo. Tras el asentamiento de Jorge Juliá en el once, el valenciano tiene la oportunidad de ser el siguiente refuerzo invernal en hacerse un hueco en las alineaciones del abulense.