El madrileño no quiso referirse a la polémica del arbitraje de La Romareda e incidió en que el sábado el estadio debe ser “una caldera” para arropar a los blanquivioletas

El Real Valladolid está plenamente concentrado en el objetivo final, que no es otro que alcanzar un play-off de ascenso que hace un par de meses parecía algo inimaginable. Bien lo saben sus jugadores, entre ellos Óscar Plano, quien atendió este martes a los medios de comunicación después de un entrenamiento matinal en el que se ausentaron los lesionados Deivid, Cotán y Luismi. “Hace dos meses parecía que no se creía en nosotros y que no nos jugaríamos nada, pero llegamos a la última jornada en una situación favorable“, comentó el madrileño.
Al partido del domingo de La Romareda no quiso hacer excesiva mención y evitó pronunciarse sobre la polémica arbitral y los dos penaltis que les cobraron, alegando que es algo que “ya está olvidado” y que están “centrados” en el envite ante Osasuna, aunque sí se refirió al ambiente. “Se notó en varias fases del partido que la afición apretaba”, recordó, algo que espera que el sábado haga Zorrilla: “Queremos que desde el primer minuto se oiga a la afición, que haya buen ambiente para salir con ese plus motivacional. Seguro que lo van a dar”.
Durante toda su intervención, el atacante hizo hincapié en que espera que el estadio sea “una caldera desde el primer minuto” que ayude a marcar “el primer gol”, una petición que este lunes hizo también Óscar Puente, alcalde de Valladolid, y que no es ni mucho menos descartable, puesto que ya han sido retiradas más de 4.000 localidades de las puestas a disposición de los abonados al precio de cinco euros.
Ese plus, ese “puntito más”, deberá sumarse a un equipo que a estas alturas tiene de sobra asimilados los “conceptos tácticos” y solo necesita que el impulso de motivación le lleve a buen puerto. Porque el ánimo lo hay, incluso después de la derrota en Zaragoza, ya que los de Sergio González siguen dependiendo de sí mismos. “El sábado vamos a salir a hacer nuestro trabajo. Sabemos de nuestras virtudes y que ellos van a venir a hacer su partido y a ganar, pero somos fuertes en casa y si hacemos nuestro juego, va a salir a nuestro favor”, aseveró Plano.
Esas revoluciones altas han provocado este martes un conato de pelea entre Ontiveros y Gianniotas, que no pasó a mayores. “No hay que darle importancia; la gente está metida. En el vestuario han hablado y se han abrazado; son cosas que pasan en cualquier familia y ya está solucionado”, confirmó el mediapunta, que ve al vestuario “moralmente muy unido”, concienciado y centrado en Osasuna.
Con todo, Óscar Plano no piensa “que sea el partido más importante”; sabe lo que hay en juego, pero cree “que va a haber más”, igual que sus compañeros. “Sabemos lo que nos jugamos, pero espero que el partido más importante esté por venir”, concluyó el madrileño, confiado.
