El técnico del Real Valladolid se olvida de las ausencias y de los posibles refuerzos para centrarse en la primera alineación en la Liga Santander, de la que no ha querido dar pistas, aunque sí reconoce tener “perfilada”
Si con algo soñó Sergio González a su llegada al Real Valladolid fue con alcanzar este momento: la rueda de prensa previa al primer partido en Primera División. Así sucedió este jueves, a falta de poco más de veinticuatro horas de que el Real Valladolid debute y, además, estrene la Liga Santander 2018/19, frente al Girona.
Aunque ni por esas el técnico catalán se pone nervioso: “Estoy tranquilo e ilusionado. Conseguir el año pasado subir a Primera División fue un sueño y ahora toca disfrutar y competir“.
Pero lo único importante llegados a este punto es llevarse la victoria de Montilivi y, para ello, González volvió a destacar la importancia del grupo. “Fuimos un hormigón el año pasado y la idea no debe cambiar. La clave siempre será el bloque, nuestra base, haya refuerzos o no”, señaló.
Y es cierto que esas incorporaciones no terminan de producirse, aunque es algo que en estos momentos no inquieta en exceso al entrenador. “Ya dijimos que habría muchos cambios en la última quincena de agosto. El proceso es largo y difícil y por eso estoy tranquilo”, dijo, y recalcó su “total confianza en el once que saldrá en Girona”.
De esa primera alineación no ha querido dar pistas, pero sí ha insinuado que Chris Ramos “tiene muchas opciones” de salir de inicio. Quien no podrá hacerlo es Ivi, tras lesionarse esta semana, y que, como todas las bajas, “trastoca los planes”. “Es un paso atrás en su puesta en forma. Nos tiene que dar un salto de calidad por su experiencia, pero ocuparemos su hueco de la mejor forma posible”.
La gran duda es la de Óscar Plano de quien González afirmó que “todavía no está para jugar los noventa minutos”, pero sí ha entrado en la convocatoria. Quienes no figuran en ella son Moi y Antonio Domínguez. En caso del segundo, el míster señaló que en vista de que hay mucha competencia en su puesto y no contará con los suficientes minutos, “lo mejor para todos será buscar una cesión para él”.
El balón parado, punto fuerte del Girona
“Con nuestras armas intentaremos sorprender al rival”, explicó Sergio González, que no escatimó en elogios hacia un Girona que afronta una nueva etapa con Eusebio. No obstante, el catalán piensa que aún quedan secuelas de la era de Machín, caracterizada por un “fútbol más directo”, y que por ello se verá a un conjunto que mezcle las dos versiones.
Y, a mayores, el Real Valladolid deberá combatir el balón parado. “Es uno de sus puntos fuertes gracias a varios futbolistas que sacan mucho rendimiento”, admitió, aunque añadió que el equipo estuvo trabajando esa faceta a lo largo de esta semana.
Todo con el objetivo de que el conjunto blanquivioleta sume los primeros tres puntos en su nueva etapa en Primera División en la que será necesario “ir de la mano” para alcanzar la nueva meta, que es la salvación. “Hay que olvidar lo que no tenemos, potenciar lo que mantenemos y trabajar con ello”, concluyó.