Miguel Ángel Gómez defiende en rueda de prensa a su equipo basándose en el incremento estimado por el CIES Football Observatory

El Real Valladolid ha cerrado en lo que va de mercado siete cesiones –seis caras nuevas y Enes Ünal–, fórmula que despierta recelo en un sector de la afición, que ve como, en cambio, otros clubes sí firman traspasos. Una vez más Miguel Ángel Gómez ha salido al paso de esta circunstancia sin eludir hablar del manido límite salarial y reconociendo las mayores apreturas con respecto a rivales que formarán parte de la misma pelea por la salvación.
El director deportivo respeta “todas las críticas” e incluso le gustan, prefiere “que la afición sea exigente”, aunque también invita a “analizar las cosas con objetividad”. No en vano, según el observatorio CIES dependiente de la FIFA el valor de mercado de la plantilla se ha multiplicado casi por tres, pasando de los 29’64 millones de euros de la pasada temporada a los 84’16 actuales, un incremento que es mayor según Transfermarkt, que cifra ese valor en 91’25 millones. “Eso te dice que el valor de la plantilla es alto [superior a cinco clubes según el prestigioso portal alemán]. Y estamos intentando aumentar el nivel de todas las posiciones”, defendió Gómez.
Y es alto porque el Real Valladolid en este mercado ha accedido a los préstamos de Andriy Lunin, mejor portero del último Mundial sub 20, o del internacional sub 21 por España Pedro Porro, en este último caso, además, pudiendo cerrar una opción de compra, que no siempre se puede. “Lo ideal para el club [teniendo en cuenta su situación económica] es esta fórmula, porque te da tiempo para testear y hacer una apuesta sin necesidad de asumir un coste extra”, analizó el andaluz, que ha conseguido incluir esas cláusulas también en las llegadas de Fede Barba y –al filial– de Gianluca Mancuso.
Con todo esto no renuncia a comprar –“lo que se pueda comprar y nos guste”, matizó–, aunque a día de hoy es difícil hacerlo, puesto que firmar a un jugador experimentado en alguna posición en la que actualmente hay dudas por la juventud de los presentes es caro, en torno al millón y medio si se tiene en cuenta sueldo y bien la cantidad correspondiente a la amortización (traspaso) o al pago por la cesión, y el club no puede asumir ese gasto, por lo que quizá toque seguir apostando por los jóvenes; eso sí, con gusto, tanto Sergio González como el propio Gómez, incidió este.
Así, hasta el cierre del mercado “pueden llegar cosas” y el Pucela está abierto a esas típicas “situaciones de final de mercado que se dan y que no te esperas”, aunque el director deportivo no sabe si podrán “abordarlas”. Dependerá de cuánto se pueda afinar el límite salarial y de que se ajusten a las condiciones a las que el Pucela puede llegar, de las que son conscientes otros clubes, como se ha visto en la colaboración prestada por el Everton con Sandro o por el Real Madrid con sus tres cedidos.
“No podía dejar el barco sin capitán”
En su comparecencia durante la presentación de Lunin, ya con cierta perspectiva, Miguel Ángel Gómez fue preguntado por su salida interrumpida cuando parecía ir a marcharse al Levante. Sin ambages, respondió que “no era el momento” y que entendía que “no podía dejar el barco sin capitán”, que sentía la “confianza de Ronaldo” y que dados los cambios estructurales en los que estaba participando relativos a su parcela no creía que debiera cambiar de dirección.
