Militará en el equipo de División de Honor después de brillar en el juvenil del Salamanca y de debutar en Tercera División con el filial charro
El Real Valladolid continúa pescando en nuestra comunidad. Después de materializar varios fichajes de clubes procedentes de Castilla y León, el último que ha cerrado es el de David Mellado, mediocentro del Salamanca, tal y como ha podido saber Blanquivioletas y como publica también Saldeporte.
Nacido en 2002 e integrante del primer equipo juvenil del club salmantino durante sus dos primeros años de juvenil, militará la próxima temporada en el División de Honor de Julio Baptista, después de lograr convencer a los técnicos de las categorías inferiores blanquivioletas. Este pasado curso brilló y luchó por el ascenso a la Liga Nacional y debutó en la Tercera División, categoría en la que disfrutó de más de media hora de juego repartida entre los partidos contra el Santa Marta y La Bañeza.
A pesar de que la pandemia mundial de coronavirus y el parón del fútbol comprometieron la posibilidad de observarle, finalmente la coordinación de la cantera se decidió a cerrar a un jugador en el que tiene plena confianza a pesar del importante salto de categoría que supondrá pasar de la Regional Juvenil a la División de Honor. No en vano, inicialmente la idea era que se ejercitase en el tramo final del curso con el que será su equipo para poder testarle de primera mano.
Sin embargo, las ofertas de otros clubes profesionales llevó al Real Valladolid a materializar su anticipación, puesto que fue el primero y el que más interés había mostrado en firmarlo. Así, se barajó incluso la posibilidad de que hiciera la pretemporada a fin de que intentara hacerse con un hueco en un centro del campo ya poblado. Sin embargo, existía la creencia de que sí o sí se quedaría, dada su calidad, y finalmente se ha optado por la vía del fichaje directo, debido a ese firme interés de otros equipos y a que se trata de un perfil inédito en el futuro ‘Divi’.
De esta manera, Mellado, que actúa como ‘seis’ puro y que venía mostrando un importante registro asociativo en la posición de mediocentro, será una de las caras nuevas de un proyecto que ya contaba con un primer fichaje, el del cordobés Diego Moreno. Después de ser ojeado por los principales responsables de captación de las categorías inferiores, recalará en Los Anexos, donde confirmará el importante salto competitivo y compartirá vestuario con una generación, la del 2002 –a la que pertenece–, llamada a hacer cosas importantes el próximo año en División de Honor.