El Parquesol Femenino, impulsado por la gran victoria ante el Madrid B, recibe a un conjunto que siempre le ha puesto las cosas complicadas

Hay equipos que destacan por jugar muy bien con la pelota en su poder, otros que, sin embargo, se sienten más cómodos sin el balón y realizan una gran labor defensiva; pero luego están otro tipo de conjuntos que son, directamente, incómodos. Es el caso del AD Alhóndiga, que aterriza en el José Luis Saso este fin de semana con el fin de complicarle la vida al Parquesol Femenino, como viene haciendo en las últimas temporadas.
Aunque, eso sí, no siempre con éxito. De hecho, la pasada campaña las naranjas sacaron los dos triunfos, pero no exentos de sufrimiento.
En casa, Alexia selló un triunfo postrero, en uno de los partidos más flojos del curso que se le recuerdan al Parquesol y, en la vuelta, se sudó de lo lindo para vencer por dos goles a uno. A medida que avanzaban las semanas cobró aún más mérito esa victoria, y es que las vallisoletanas fueron las únicas que marcaron dos goles en ese campo en toda la temporada –ni siquiera el Tacón ni el Atleti B lo lograron–.
Lo que sí es evidente es que cada vez que se han medido ambos el resultado se ha dirimido por detalles, a veces para un lado y a veces para otro, pero si alguien gana rara vez no lo hace por la mínima. Con ello, el Parquesol afronta la dificultad de ganar a un equipo que, si tarda en recibir un gol, se acomoda y espera a que el rival se desgaste para crear la ocasión y aprovecharla si es posible.
Dicho esto, este domingo a partir de las 16:00 horas en el Saso van a confluir dos estilos diferentes –la posesión y la profundidad de las chicas de Rubén Jiménez contra el orden y la sobriedad de las getafenses–, pero también dos dinámicas opuestas: las visitantes vienen de ser goleadas por el Tacón, mientras que las locales llegan al partido con el precedente del sólido triunfo frente al Madrid B.
“El vestuario está a tope después de esa victoria. Para nosotros fue muy importante”, señala su técnico, que destaca el gran trabajo físico de su equipo y pone como ‘pero’ la “falta de control con el balón” en algunas fases del choque. Aun así, “ganar en un campo así supone un chute de moral para la plantilla”.
Además, las delanteras del Parquesol se fueron con la escopeta cargada. Ali y Alicia Rey ya estrenaron su cuenta goleadora,y este fin de semana será más necesario que nunca aportar en ataque ante un equipo tan aguerrido.
Aunque igual o incluso más importante será el papel de Charle, encargada de buscar las cosquillas a una defensa del Alhóndiga que dará más de un quebradero de cabeza. “La clave estará en ser pacientes con el balón y que el partido no sea un correcalles”, sostiene Rubén, consciente del gran bagaje defensivo del rival.
Así las cosas, la convocatoria del Parquesol se conforma de dieciséis jugadoras: Lucía, Celia, Judy, Alicia Fernández, Rivas, Noe, Maka, Carla, Nata, Barbi, Yarima, Charle, Sandra, Iria Castro, Ali y Alicia Rey.
