El entrenador del Real Valladolid mostró su frustración tras la tercera derrota consecutiva de sus pupilos

No basta con jugar solo la mitad del partido, y este martes Paco Herrera se ha percatado de ello. Minutos después de la tercera derrota seguida en liga, el entrenador del Real Valladolid ha salido a rueda de prensa para analizar un partido que, según si criterio, se dividió en dos partes totalmente diferenciadas. Un primer periodo en el que los vallisoletanos no aparecieron, y una segunda donde merecieron no irse de vacío.
“No aparecimos en la primera parte, al igual que el Lugo no existió en la segunda. Nuestra primera mitad fue para olvidar. El equipo salía al campo después de conjurarnos, y convencidos de que saldrían las cosas bien. No encuentro explicaciones para lo que ha sucedido”. Así resumió Paco Herrera sus sensaciones después del encuentro, que se podrían reducir a una palabra: frustración. La primera mitad del equipo fue desastrosa, y el míster no tenía motivos para explicarlo.
Sin embargo, la segunda parte dio un giro tremendo. “En la segunda mitad está el camino para sacar el equipo adelante”, apuntó. La reacción no sirvió para remontar el encuentro, pero sí para dejar un sabor de boca menos amargo en la boca del míster. “Sigo sin ver al equipo jugar noventa minutos. El otro día lo vi sesenta, y hoy [por este martes] tan solo una parte”, añadió. No obstante, Herrera reconoce que no le importa tanto perder si el equipo juega como en el segundo acto.
A la mayoría de los entrenadores del fútbol profesional, después de tres partidos consecutivos cosechando derrotas, se les caería el ánimo. Pero hasta en esto Herrera es diferente. “Soy muy pesado y tengo mucha fuerza de voluntad y no tengo ninguna duda de que este equipo va a salir adelante“, aseguró. El catalán volvió a mostrar la confianza plena que tiene en la plantilla, y reiteró que el equipo es bueno y que ahora toca valorar los aspectos positivos del partido, que los hay. “Creo que tenemos mucho trabajo por hacer. Defenderé a este grupo al 100%”, afirmó.
Empieza a ser frecuente oír hablar del colegiado al técnico blanquivioleta. Hoy evitó hacerlo, aunque no abandonó la sala de prensa sin dar opinión de la jugada más polémica del encuentro. “Habíamos merecido al menos la opción de tirar el penalti; era bastante claro”, sentenció, lamentando que diera ley de la ventaja.
No se mordió la lengua y aseguró que en las jugadas determinantes “el equipo estaba teniendo mucha mala suerte”, y no solo por las ocasiones falladas, sino también por la actuación arbitral. “El camino no es quejarse del árbitro, pero estamos teniendo mala fortuna con ello en los últimos partidos”, manifestó.
En cuanto al rival, el míster solo tuvo palabras de alabanza hacia los de Sampedro. “Es un equipo que me gusta mucho. Presiona muy bien y tiene sentido el juego que practican. Tiene tantos jugadores consolidados que parece que juegan de memoria”, comentó. Además, admitió que si siguen a este ritmo, “merecerán estar ahí arriba”.
 
			