Los primeros meses de 2025 están siendo duros para el Real Valladolid y sus aficionados. También para el entrenador, Álvaro Rubio, quien aún no conoce la victoria este año, ni con el primer equipo ni con el filial. Preocupan sobre todo en los resultados, pero también otros números, especialmente los que tienen que ver con la efectividad en las dos áreas. Tras la última derrota por 0-4 contra el Getafe, el calvario no es que se mantenga, sino que se intensifica.
Álvaro Rubio con el Promesas en 2025

El Real Valladolid Promesas tuvo un mal inicio de año. Tras cerrar 2024 con una victoria contra el Compostela, el filial no volvió a ganar un partido hasta el debut de Manu Olivas. En seis partidos disputados, Álvaro Rubio cosechó cinco empates, cuatro de ellos a cero, y una derrota contra el Marino de Luanco por 4-0 en un encuentro en el que jugó buena parte del partido con uno menos tras una expulsión a Jorge Delgado que posteriormente se le retiraría.
Bien es cierto que el Promesas tuvo opciones de ganar en varios de los empates sin goles, pero la falta de acierto de cara a puerta de Arnu, Jorge Delgado y el resto de atacantes en este tramo de sequía goleadora no permitió al filial blanquivioleta sumar tres puntos. El primer tanto de 2025 llegó en el sexto partido contra el Rayo Cantabria, filial del Racing de Santander, pero el equipo tampoco pudo llevarse la victoria. El balance de este tramo es de cinco puntos obtenidos, seis goles en contra y dos a favor.
Resultados tras convertirse en entrenador del primer equipo

Tras hacerse Álvaro Rubio con las riendas de la primera plantilla de forma definitiva, el Real Valladolid recibió una goleada en San Mamés contra el Athletic (7-1). Desde ese punto de partida, la situación solo podía ir a mejor. Sin embargo, ya son seis las jornadas de 2025 en las que en el banquillo ha estado el riojano y tan solo ha sumado un punto, en el Estadio José Zorrilla contra Las Palmas y jugando con un futbolista más durante alrededor de setenta minutos.
Si bien en su época de sequía con el filial daba la sensación de que el equipo mereció más en alguna ocasión, el Real Valladolid se ha visto inferior a todos los rivales contra los que se ha medido, salvo en el ya mencionado choque contra el conjunto canario y teniendo en cuenta la superioridad numérica durante tanto tiempo.
La última derrota contra el Getafe refleja la actual situación de impotencia del Real Valladolid y Álvaro Rubio no es capaz de dar con la tecla para revertir ni la situación global ni la suya propia, ambas arrastradas desde tiempos anteriores a la unión de sus caminos. Con el primer plantel, el técnico suma un solo punto, ha recibido 16 goles y ha anotado cuatro.
El balance total en los doce partidos de 2025 en los que ha dirigido el exfutbolista del Pucela es de seis empates, seis derrotas, 22 goles encajados y solo seis a favor. Unos números pobres que hablan de la dinámica del equipo, de la cual a estas alturas resulta casi imposible salir.
El calvario de Álvaro Rubio este 2025 va más allá del contexto que se encontró al pasar de Los Anexos al Estadio José Zorrilla, y si no es capaz de revertir la situación el Pucela podría ver su nombre escrito en otro registro negativo de la historia y firmar una vuelta completa sin ganar un partido. La complejidad del asunto podría plantearse de otra manera para tratar de sacar detalles y conclusiones positivas de cara al futuro.
Chuki, quien ya ha renovado con el Real Valladolid, cuenta con más continuidad bajo las órdenes de Rubio y otros canteranos a los que ya tuvo en el Promesas y los que no ha dado apenas oportunidades podrían empezar a participar, teniendo en cuenta la planificación del Real Valladolid, ya que la dirección deportiva pretende que varios de ellos estén el año que viene en el primer equipo.
 
			