La pretemporada va tocando a su fin y el Real Valladolid deberá ir ordenando, también, lo que será su puesta de largo para recibir al Ceuta en el primer partido de LaLiga Hypermotion para el conjunto blanquivioleta. En esa vuelta a la normalidad, Iago Parente y Galde, regresan ya a la dinámica del Promesas mientras que Aranda, también defensa central, seguirá, por el momento, a las órdenes de Almada.
Entendiendo que, por el momento, esta dinámica no es más que un ejercicio de previsión para completar la nómina defensiva de cara a los próximos entrenamientos, parece que José Luis Aranda sí tiene algo que le ha gustado especialmente al entrenador charrúa que puede serle útil para la temporada 25/26. De hecho, de los efectivos en el centro de la defensa, Aranda ha sido el más utilizado, por encima de los ya citados Iago Parente y Galde, ambos citados ya el pasado día 2 de agosto para el encuentro de pretemporada del Promesas ante el Rayo Cantabria.
Aranda, un central tradicional y con futuro
José Luis Aranda, nacido en Valladolid enero de 2006 (19 años cumplidos), es un futbolista con una envergadura llamativa de 1.87 metros que le garantiza poder sumar en ese terreno físico. Para su posición, como defensa central, ese plus le va como anillo al dedo, pues su capacidad para hacerse fuerte en el centro de la defensa del equipo juvenil le valió para ir tirando de él para avanzar a pasos agigantados y formar parte, pronto, del día a día de un Promesas que se fijó en él en los últimos compases de la temporada.
Esa valentía y capacidad para no complicarse hacen de él un central de valor. Un perfil de central más que interesante que le acerca a poder ser un perfil útil para Almada en caso de necesitarlo. Aranda sólo participó en el encuentro ante el Pafos, siendo titular en el primer duelo de pretemporada y demostrando que, a nivel físico, es un jugador con una maduración temprana que puede darle algo de ventaja frente a otros compañeros para poder ser un elemento interesante para construir la defensa del primer equipo. Sin ser un perfil específicamente fino en la entrega, no se arruga y tiene capacidad para anticipar con bastante solvencia, demostrando que, de seguir así, podría ser uno de los elegidos de Almada para completar plantilla durante la temporada si así lo exige la necesidad.
Vuelta a la normalidad
Como se cita anteriormente, Javi Baraja ya ha podido contar esta semana con la participación de Iago Parente y Galde. El primero, Parente, llegó a debutar en los últimos estertores de la temporada pasada a las órdenes de Álvaro Rubio en primera división, se trata de un central de 19 años muy fiable, con gran toque de balón, buena actitud en la salida y capacidad para ser solvente en los duelos. En el caso de Galde, un prototipo de defensa zurdo muy interesante por su polivalencia, movilidad y carácter a pesar de sumar solo 17 años.

Desde su vuelta a la dinámica de cantera y aunque ambos vieron el partido contra el Rayo Cantabria desde el banquillo, Iago Parente ha podido sumar ya minutos en la disciplina de Baraja con el Promesas en el último duelo ante la Ponferradina, siendo titular y completando el partido con victoria del equipo vallisoletano por dos goles a cero frente a su rival en El Bierzo. Dos centrales que serán seguidos, a todas luces, por el staff de Almada, pero que deberán seguir su desarrollo mientras tanto en Los Anexos ante un Baraja que, seguro, sabe sacar todo el jugo de su fútbol.
Un camino que, seguramente, seguirá Aranda de manera habitual a pesar de parecer el defensor central favorito de Almada para poder acompañar al grupo. Esa plaza, como es lógico, parece darle una posible ventaja para ser uno de los seis elegidos que, como comentaba Orta en sus primeros días como director deportivo, puedan completar la plantilla del Real Valladolid desde Los Anexos. Una apuesta por la cantera que, con paciencia y con conocimiento, pueda enfocar a los chavales a nuevos retos que los hagan crecer.
 
			
